Decenas de dirigentes políticos del Partidos de la Liberación Dominicana y de la oposición rechazaron ayer los actos “vandálicos” contra la sede de la embajada dominicana en Puerto Príncipe y el irrespeto a la bandera nacional y respaldaron la protesta del Gobierno a través del Ministerio de Relaciones Exteriores.
El embajador dominicano en Washington, José Tomás Pérez, deploró la quema de la bandera dominicana por ciudadanos haitianos y apoyó la decisión del Gobierno dominicano de llamar a consulta a su embajador en esa nación. Definió como una violación a la nacionalidad y la soberanía nacional, los hechos protagonizados por ciudadanos haitianos y miembros de la sociedad civil de ese país.
Mientras el presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Miguel Vargas y el senador por la provincia de La Altagracia, Amable Aristy Castro coincidieron en rechazar el ataque de que fuera objeto la sede del consulado dominicano en Puerto Príncipe.