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POR ANSELMO SILVERIO
SANTIAGO.- El sector empresarial de esta región del Cibao rechazó ayer una propuesta del cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez a fin de que se legisle para el establecimiento de la cadena perpetua. Asimismo, sostuvo que la solución para frenar el crimen y la delincuencia no está en las penas ni el castigo, sino en la educación y en la falta de plazas de trabajo y Santiago tiene más de 20,000 empleos menos.
Mientras tanto, el presidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano insistió ayer en que se apruebe este instrumento legal como mecanismos de presión para disminuir la ola de violencia que sacude el territorio nacional.
Ricardo Fondeur, presidente de la Cámara de Comercio y Producción, tras rechazar la cadena perpetua, sostuvo que para lograrse algo efectivo en este aspecto tiene que ser a base de una serie de medidas.
Entre ellas citó una mejoría en la administración de la justicia, en la situación de las cárceles, en la Policía Nacional y en todas las estructuras que está involucrada en la seguridad nacional.
Fondeur, también presidente de la Federación de Cámaras de Comercio (FEDOCAMARA), dijo que el empresariado no cree en la cadena perpetua como castigo, porque la solución no está en el castigo, sino antes de castigo.
Consideró también que en el caso de los repatriados representa una amenaza para la paz social del país, porque esos extraditados son todos criminales que están en nuestras calles hoy en día.
El cardenal López Rodríguez abogó por el establecimiento en el país de la cadena perpetua, propuesta que fue favorecida por el arzobispo Ramón Benito de la Rosa y Carpio, presidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano.
No obstante, la sugerencia fue objetada por el nuncio apostólico Thimothy Broglio; el secretario de Interior y Policía, Franklin Almeyda Rancier; el consultor jurídico del Poder Ejecutivo, César Pina Toribio y el fiscal del Distrito Nacional, José Manuel Hernández.
SANCIONES
Por otro lado, el abogado criminalista Ramón Antonio Veras (Negro), consideró que antes de pensar en las sanciones que se pueden aplicar a los delincuentes, primero hay que tomar en consideración las medidas necesarias para sanear el cuerpo social donde desempeñan sus actividades las personas que han delinquido.
Dijo que la sociedad dominicana está enferma, no solo por la delincuencia, sino por otros vicios, por otras taras sociales que genera el ordenamiento social.
Veras consideró que la sociedad requiere de muchos instrumentos de reordenamiento interno para mejorar el sistema en que se descansa los instrumentos de la seguridad nacional.
