El plan de recuperación económica tras la Covid-19 del presidente Luis Abinader persiguió el doble objetivo de acelerar, a corto plazo, el crecimiento económico con creación de empleos, y reducir el porcentaje de pobreza como proporción de la población total. Su estrategia fue recuperar la senda del crecimiento sostenido alrededor del potencial de la economía, facilitando inversión de empresarios dominicanos y extranjeros en diferentes sectores de la economía.

Los objetivos no solo se lograron, la velocidad fue de crucero lo que sorprendió a organismos internacionales, comportamiento de nuestra economía marcó una importante diferencia con otros países de la región, que sufrieron y sufren crisis económica, política y /o social agravada por el contexto internacional cargado de incertidumbres.

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Fue suficiente la estabilidad económica y política del país para llamar la atención de empresarios dominicanos y extranjeros, ganando confianza la política económica y el presidente Abinader. Lo muestran las estadísticas que presentan un ritmo de aumento sin precedentes de la inversión privada en los diferentes sectores.

El Parque Empresarial Las Colmenas (Pelco) y Laboratorios MALLEN, ubicados en el sector Matagorda, Autopista Circunvalación Norte, inaugurados por el presidente Abinader el pasado viernes, son dos de los más recientes esfuerzos inversor.

En su discurso, José Mallen, presidente del Grupo, dijo que en edificios y modernas maquinarias invirtieron mas de US$15 millones, que las nuevas plantas de manufacturas aumentan la capacidad de producción de las 55 referencias que trabajan desde hace tiempo, y elevan a 85 por ciento el componente de los productos fabricados localmente, reduciendo a solo 15 por ciento la maquila internacional.

El Gobierno da respaldo total a esfuerzos inversores privados que demuestran tienen impacto favorable en variables macroeconómicas fundamentales, como sucede con las del Grupo MALLEN que lo hacen de la siguiente manera. Uno, el mayor contenido de valor agregado de los productos que fabrican, aumenta el aporte que han venido haciendo al crecimiento del PIB real de la economía. Dos, los 2,000 y 3,000 empleos directos e indirectos adicionales que crean, aumentan el volumen total de ocupaciones que sumó 4,952,977 en 2023, y si no aumenta la Fuerza Laboral Activa, reduce aún más la tasa de desempleo que cerró en un 5% de la oferta total de trabajo.

Tres, contribuye a reducir el índice de pobreza monetaria a nivel nacional, de 23.0% de la población total en 2023. Cuatro, ahorra divisas al país al reducir el componente importado de las 55 referencias. Y, cinco, incorporando nuevas tecnologías productivas, el Grupo MALLEN mejora la productividad del país.

Termino la nota con los siguientes efectos. Uno, el esfuerzo inversor de empresarios privados (dominicanos y extranjeros) explica, en buena medida, el crecimiento económico real acumulado de 12.9%, periodo 2020-2023, criterio que tambien sostienen Organismos Internacionales, firmas calificadoras de crédito y nuestro Banco Central.

Dos, por el aporte del esfuerzo inversor de empresarios privados en la formación bruta de capital fijo, que es como se mide la inversión general (privada y publico) que ascendió a US$37,142.56 millones, un 30.5% del PIB, en 2023, el monto supero el ahorro interno de US$31,611.3 millones, equivalente a 26% del PIB.

Y tres, desfase negativo entre ahorro interno y formación bruta de capital que se reflejó automáticamente como déficit en cuenta corriente de la balanza de pagos, en 2023 ascendió a US$4,573.5 millones, un 3.8% del PIB, menos que los US$6,326.8 millones, 5.6% del PIB, de 2022.