De acuerdo con las expectativas de la Procuraduría General, la entrada del Centro de Corrección y Rehabilitación de Moca al Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria  consolidará la implementación de ese proyecto.

Se pretende convertir al  recinto en modelo para la región del Caribe, lo que implica una inversión  cercana a los RD$300 millones, según se informó.

El procurador general, Radhamés jiménez, precisó que ese es el centro más grande que funcionará bajo el nuevo sistema, con capacidad  para 1,200 internos.

Recordó  que con la incorporación de ese recinto  sumarán 12 los convertidos en Centros de Corrección y Rehabilitación (CCR).

La obra cuenta con seis edificaciones tipo celdas, de tres niveles cada una, con tres patios para la recreación de internos y la clasificación de los mismos por su tipo de reclusión, dos comedores, aulas, cocina, biblioteca, lavandería, economato, barbería y dispensario médico,  cuatro talleres, área de niños y consultorio odontológico.

“Los internos penitenciarios del CCR de Moca al igual que los demás que cumplen condenas en los 11 centros que operan bajo el nuevo modelo, recibirán los programas de formación que se imparten dentro del proyecto, que incluye alfabetización, cursos de informática, inglés y entrenamiento en producción agrícola e industrial”.  Un informe detalla que  dentro de los programas de tratamiento los internos participan en actividades artísticas, deportivas y recreativas A propósito, Jiménez  definió el nuevo modelo como un aporte para reducir la delincuencia porque se regeneran ciudadanos para retornarlos productivamente a la sociedad.

Destacó la colaboración del Patronato Nacional Penitenciario, que encabeza monseñor Nicolás de Jesús López Rodríguez. El nuevo modelo es coordinado por Roberto Santana, quien tiene a su cargo la ejecución del plan “que abarcará a todos los centros del país”.

El director general de Prisiones, mayor general Manuel de Jesús Pérez Sánchez,  tiene bajo su responsabilidad los recintos que funcionan bajo el sistema tradicional.

Con esto, las autoridades buscan erradicar el hacinamiento de los viejos recintos, con la construcción o remodelación de sus plantas físicas, implementación de programas de educación, rehabilitación y recreación, así como acceso a servicios de salud física y mental.

Entre las ventajas de ses sistema, el procurador cita la reducción del analfabetismo y  de la reincidencia.

Se han incorporado los recintos de Vista al Valle de San Francisco de Macorís, San Felipe de Puerto Plata, Rafey-Mujeres y Rafey-Hombres, en Santiago; Elías Piña, Femenino de Najayo, en San Cristóbal; Dajabón, Mao, Monte Plata y Haras Nacionales, en Santo Domingo, y la primera etapa de San Pedro de Macorís.  Se indicó que se avanza en la construcción de otros recintos.