POR LOYDA PEÑA
Monseñor Agripino Núñez Collado calificó ayer como “muy grave y preocupante” el elevado número de abortos practicados  a adolescentes durante el pasado año 2006 y afirmó que  uno de los grandes retos que tiene la sociedad dominicana es buscarle solución a esa situación.

También consideró que un factor determinante en esa problemática es la marginalidad social y la falta de educación sexual entre los adolescentes.

El prelado respondió así al preguntársele su opinión acerca de los 11,000  abortos practicados  en las maternidades, Nuestra Señora de la Altagracia y de Los Mina, durante el año 2006.

“Ese es un problema serio y preocupante que yo creo que se resolvería con educación y que sectores como las iglesias, la Secretaría de Educación y los padres mismos, deben trabajar en eso: Buscar la forma de cómo educar a la juventud, a las adolescentes, que según se ha dicho, son la mayoría las que confrontan esta situación”, dijo Núñez Collado.

De acuerdo con sendos reportajes publicados en el periódico HOY bajo la firma de la periodista Altagracia Ortíz, de los 11,000 abortos practicados el pasado año, el 80% han sido provocados a adolescentes con edades que oscilan entre los 15 y 19 años.

Ese alto porcentaje de interrupción de la maternidad y  del elevado número de mujeres que aborta, incluso, hasta tres veces al año, ha obligado a las autoridades de salud a hacer que muchas más adolescentes asuman métodos anticonceptivos o de planificación familiar, agrega el reporte periodístico.

A  Monseñor Núñez Collado se le observó que en la Cámara de Diputados está pendiente la aprobación del Código Penal, básicamente por el capítulo referente a la práctica del aborto, al cual son oponibles la Iglesia Católica y el Colegio Médico Dominicano  y su respuesta fue como sigue:

“El aborto es un atentado a la vida y en eso la Iglesia es intransigente. Lo que hay es que buscar la manera de educar para que una muchacha no llegue a tener ese problema de un embarazo indebido y eso se logra con educación sexual”.

 Núñez Collado fue entrevistado sobre el tema al término de una reunión que sostuvo con el presidente de la Cámara de Diputados, Julio César Valentín, para tratar el caso de la reforma Constitucional.

Sobre el particular, manifestó que la Comisión para la Reforma Constitucional que él coordina decidió consultar y procurar la opinión de las cámaras legislativas y de la Suprema Corte de Justicia sobre el proyecto de reforma a la Carta Magna, por instrucciones del presidente Leonel Fernández.

Por su lado, el presidente de la Cámara Baja advirtió que el Congreso Nacional será quien tendrá la última palabra sobre la reforma constitucional y anunció la celebración de un encuentro-almuerzo con los voceros de las distintas bancadas que convergen en las dos  cámaras legislativas, los presidentes de las comisiones de Justicia y los ex presidentes de ambos hemiciclos, para discutir el tema.

“Lo que mande la Comisión (de la Reforma) no es palabra de Dios, sino recomendaciones importantes que ojalá nosotros podamos estar absolutamente de acuerdo, pero es una responsabilidad impostergable del Congreso de la nación que debemos aprovechar para aprobar una  reforma constitucional que sea definitiva y responda a los intereses nacionales”, puntualizó Valentín.