POR TEÓFILO ABREU
El presidente de la Federación Internacional de Colegios y Asociaciones de Abogados de las Antillas, Diómedes Olivares, consideró que el reforzamiento militar en la frontera domínico-haitiana debe ser con carácter permanente y no coyuntural.

 Olivres basó su planteamiento en el hecho de que la mayor parte del tráfico de drogas, armas e ilegales se produce a través de esa zona, con la complicidad de militares.

Dijo que cada vez que se adoptan  medidas con el fin de controlar el flujo ilegal de haitianos hacia territorio dominicano, lo que se busca es sólo publicidad, que apenas dura dos o tres días y al poco tiempo se deja sin efecto.

“Eso es siempre que debe estar, no sólo ahora, porque todos sabemos que la mayoría las armas ilegales, las drogas y los actos delincuenciales entran por la frontera. Todas las armas que ustedes ven entran por la frontera. ¿Y quiénes lo permiten? Los militares”, expresó.

El jurista sostuvo que son los militares quienes permiten el tráfico de armas y drogas desde  el vecino país.

“No es otro. No es usted ni soy yo, son los militares que lo permiten, y todo el tráfico que hay son los militares que lo permiten. En todo hay involucrados militares,  porque nada pasa si no hay un chequeo militar. Entonces hay que ser más rígido, porque a veces los mismos que están en la protección son dueños de grandes negocios”, sostuvo.

Consideró, por otro lado, que las autoridades dominicanas deben  aprender de otros países. como  España, que tiene un  problema similar  con Marruecos, donde diariamente hay barcos y yolas, “igualito que nosotros de aquí a Puerto Rico”.

Explicó que en base al  sistema aplicado por España, en el caso de un niños nacido de  un haitiano residente en República Dominicana, debería adquirir la misma categoría de su progenitor.

 “Si ese ciudadano está con un  permiso de residencia de trabajo, su hijo no es dominicano. Adquiere automáticamente una residencia, y a partir de los 16 años, ese niño decide si es dominicano o si es haitiano, y ya con eso yo pienso que resolvemos el problema haitiano”, explicó.

Olivares consideró que una regularización de esa naturaleza significaría una solución al problema migratorio desde Haití, por cuanto se acabaría la anarquía existente entre los dos países.