República Dominicana tiene, aproximadamente, nueve millones de habitantes. Se estima que el 1.7% de esta población esta infectada con el VIH.
La vía de transmisión principal es la sexual, con predominio heterosexual; a ésta le sigue la intravenosa y la transmisión vertical, que es la que se transmite de madre a hijo.
Las estadísticas indican que el 2% de las embarazadas están contagiadas de VIH.
Desde su implementación en todo el país, en el 2004, el Programa Nacional de Reducción de la Transmisión Vertical del VIH ha llevado felicidad a muchas madres y familias al ver sus retoños nacer libres del VIH gracias a oportunos servicios e insumos sanitarios. De ahí que el director ejecutivo del Consejo Presidencial del Sida (COPRESIDA) recomiende a las embarazadas hacerse la prueba de VIH para evitar la transmisión del virus de madre a hijo y detener así el crecimiento de la epidemia que causa 8200 muertes por día en el mundo.
El doctor Humberto Salazar dijo que el COPRESIDA ofrece la prueba de VIH de manera gratuita en los centros públicos del país y que mujeres en período de gestación no se realizan la prueba poniendo en riesgo la salud de sus hijos.
Reveló que sólo el 54% de las mujeres en período de gestación que se hacen la prueba de VIH conoce de manera oportuna su condición; el 46% restante está expuesta al tener a su bebé, y -en consecuencia- aumenta la posibilidad de que su hijo adquiera el virus.
Dijo que producto de las intervenciones que hace la entidad, a través del Programa Nacional de Reducción de la Transmisión Vertical que se ejecuta en más de 140 centros en todo el país, se ha logrado que de cada 100 embarazadas con VIH positivo solamente nazcan siete niños con la condición.
Asimismo, dijo que dicha tasa puede reducirse a un 1% si las mujeres cumplen con el programa de seguimiento prenatal durante el primer y segundo trimestre del embarazo. Se estima que alrededor de cuatro mil niños viven con VIH, mil de éstos han sido identificados.