El rector del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec), Rolando Guzmán, calificó de acertado el énfasis que le ha dado el presidente Danilo Medina a la innovación y a la competitividad, sin embargo considera necesario mejorar la articulación entre el Gobierno, las empresas y las instituciones de educación superior para lograr los avances necesarios.
Al referirse al decreto 453-18 a que declara el año 2019 como el Año de la Innovación y la Competitividad, Guzmán manifestó que las declaraciones del mandatario deben ir acompañadas de la canalización de recursos que fortalezcan el sistema nacional de invención, el capital humano, el sistema de producción y la educación superior.
“Ese proceso implica aspectos como la creación de infraestructura en las universidades para el fomento de la innovación, destinar más fondos para la invención, mejor conexión entre las universidades y los sectores productivos, además del fortalecimiento del componente de emprendimiento, tanto dentro como fuera de las universidades”, manifestó el rector.
El funcionario expresó que desde el establecimiento de la normativa en el año 2012 el país ha estado abordando el tema con firmeza, sin embargo, la ventaja que tiene la declaración es que retoma toda la atención en ese aspecto.
Empero, insistió en que no se trata de declarar un año, sino de trabajar en lo que es necesario para mejorar la competitividad y la capacidad de innovación de la economía dominicana, lo supone una tarea de mucho tiempo.
A su juicio, el país ha estado avanzando en muchos aspectos, aunque al mismo tiempo quedan otros en los cuales se necesita seguir trabajando, como en el problema del sector energético, transporte y logística.

Puntos claves. Según Rolando Guzmán, para que la República Dominicana pueda alcanzar los niveles deseados que suponen la competitividad y la innovación es necesario priorizar la formación de recursos humanos y mejorar todos los niveles del sistema educativo dominicano.
“Se hace urgente el fortalecimiento de un currículo que responda a las necesidades de los nuevos tiempos, entendiendo que la capacidad de innovación debe ser fomentada desde la temprana edad y debe seguir siendo reforzada en todos los niveles más altos de educación superior”, puntualizó.
Agregó el académico que es necesaria la articulación de un currículo orientado hacia el emprendimiento y la invención en todos los niveles preuniversitarios, mientras que en las universidades se requiere la implementación de un currículo flexible, que propicie el desarrollo de nuevas ideas.
Asimismo destacó que para lograr que el país sea innovador y competitivo se requiere de la participación de todas la instituciones y la población en general.