La sociedad dominicana celebra hoy con diversos actos el 191 aniversario del natalicio de Juan Pablo Duarte, fundador de la República.

Los actos serán iniciados a las nueve de la mañana con una misa en la Iglesia Santa Bárbara, donde fue bautizado el patricio.

A las diez habrá un desfile, que comenzará en el local del Instituto Duartiano, ubicado en la calle Arzobispo Meriño, calle donde nació el Padre de la Patria, y terminará en el Altar de la Patria, donde será depositada una ofrenda floral.

El desfile, en el que participarán autoridades civiles y militares, es organizado por el Instituto Duartiano.

En las diversas provincias y municipios del país también habrá actos para honrar la memoria del Padre de la Patria.

Contrario a otros años, la Comisión Permanente de Efemérides Patrias no dio a conocer el programa oficial de actividades programadas para el día de hoy.

Al conmemorarse el natalicio de Duarte, diversas instituciones políticas clamaron por el fortalecimiento de los valores cívicos enseñados por el prócer.

La Fuerza Boschista, que ayer depositó una ofrenta floral en su memoria, dijo que se hace necesario una transformación de la sociedad dominicana para que reinen los principios éticos que enarbolaron los fundadores de la República.

En tanto, el Partido Unión Demócrata Cristiana(UDC) llamó a fortalecer la identidad nacional y abogó por una profunda transformación espiritual del pueblo dominicano.

Al iniciar su tradicional jornada denominada «Rescate de los Valores Patrios», el presidente de la UDCD, Luis Acosta Moreta, dijo que los dominicanos están perdiendo su identidad frente a las corrientes globalizantes.

Advirtió que una nación que no sea capaz de vibrar espiritualmente no es una nación destina a la grandeza.

«Por eso es necesario poner primero el ideario de Duarte sobre la nación y los partidos políticos», expresó.

Juan Pablo Duarte nació el 26 de enero de 1813, en la ciudad de Santo Domingo. Era hijo de Juan José Duarte, comerciante español y de Manuela Diez y Jiménez, oriunda de El Seibo.

El patricio fue bautizado el 4 de febrero de 1813, en la Iglesia Santa Bárba.

Las primeras lecciones de su educación formal las recibió primero con su madre, y luego con una profesora de apellido Montilla.

Más tarde fue admitido en la escuela de don Manuel Aybar, donde completó sus conocimientos de lectura, escritura, gramática y aritmética elemental.

Con el profesor Juan Vicente Troncoso estudió filosofía y derecho romano, pues la Universidad de Santo Domingo había sido cerrada por el Gobierno haitiano, que ocupó la parte Este de la isla en 1822.

Alrededor de 1828 fue enviado a estudiar a España. Durante su estancia en el exterior comenzó a interesarse por las ideas políticas de la época.

A su regreso al país en 1833, fundó la Sociedad Secreta La Trinitara para luchar contra la ocupación haitiana, pero pronto el movimiento fue descubierto.

Duarte contribuyó en la rebelión que derrocó al gobierno de Jean Pierre Boyer el 24 de marzo de 1843.

Charles Herard asumió el mando en Haití, pero decidió mantener la ocupación de la parte Este.

Al iniciarse los planes conspirativos, dirigidos por Duarte, el Presiente Herard se trasladó a la parte Este y emprendió la persecución de los patriotas dominicanos.

Duarte salió al exilio, se estableció en Venezuela y de allí pasó a Curazao, desde donde continuó su lucha en contra de la ocupación haitiana.

El 27 de febrero de 1844 fue proclamada la independencia nacional y entonces Duarte regresa al país y es nombrado miembro de la Junta Central Gubernativa que dirigía Thomás Bobadilla.

Luego de que Santana tomara el control del país, Duarte fue expulsado de la naciente República y esta vez inició un peregrinaje doloroso por diversos países de Europa.

Luego viajó Duarte a Venezuela. Retornó al país en 1865 cuando estalla la Guerra de la Restauración.

Ya estaba avanzado en edad y fue enviado por el Gobierno revolucionario a una misión diplomática al exterior. Jamás retornó al país.

Murió en Venezuela en 1876. Cuando se conmemoró el cien aniversario de su muerte, fue levantado un monumento a su memoria y a la de los demás fundadores de la República, en el parque independencia, que es conocido como el Altar de la Patria.