Hoy 
POR RICARDO RODRIGUEZ
SANTIAGO.- En las cuatro paredes de la Iglesia La Altagracia, los nombres más sonoros de las personas que fueron asesinadas en los tres primeros períodos gubernamentales de Joaquín Balaguer se escucharon con estridencia, en el marco de una misa oficiada ayer en recordación de esas víctimas.
Apenas el padre Juan Tomás García (quien ofició la eucaristía) pidió a los congregados que mencionaran nombres, comenzaron a escucharse los de Orlando Martínez, Maximiliano Gómez, Henry Segarra, Amin Abel Hasbún, Sagrario Ercira Díaz, Pablo Liberato Rodríguez y Gregorio García Castro.
El acto religioso fue encabezado por un grupo de ciudadanos de esta ciudad, en memoria de las víctimas de crímenes políticos ocurridos desde 1966 hasta 1978. Constituyó una respuesta a las actividades de recordación a Balaguer, cuyo centenario de nacimiento se conmemoró recientemente.
Entre los asistentes estaban Ramón Antonio Veras, Juan Batlle, Luis Estrella (hijo), Carlos Manuel Estrella, Ramón de Luna, Mayra Alvarez, Carlos Rodríguez, Darío Fernández, Róbinson Abréu Blondet y Joe Alba.
En la homilía, el padre Juan Tomás lamentó los acontecimientos que terminaron con la existencia de cientos de personas, en los primeros 12 años de los gobiernos de Balaguer, mostrando su esperanza de que la historia no vuelva a repetirse. La espaciosa nave religiosa resultó insuficiente para la cantidad de personas que asistió. Algunos de los presentes son descendientes de personas que fueron asesinadas en aquel período.
Previo al acto religioso, Negro Veras, uno de los principales convocantes, dijo que la misa era un acto de recordación de todos los que no tienen tumbas, o tienen tumbas desconocidas, porque fueron desaparecidos, como Pablo Liberato Rodríguez y los hermanos Viloria. Lamentó el jurista y político que, a pesar de los años transcurridos desde que fueron asesinados, todavía sus parientes no saben dónde llevarles flores o rezarles un responso.
Al final de la eucaristía y frente a la iglesia, el locutor Danilo Basilio pronunció algunos de los nombres que forman parte de la lista de asesinados y desaparecidos en esos 12 años, entre los que mencionó a Miguel Angel Gómez, Antonio Carrasco, José Enrique Reyes, Danilo de la Rosa, Benjamín Vásquez Brazobán y Adolfo Chalas.
También, Bienvenido Paredes, Juan Carlos Martínez, Ramón Hipólito Peralta, Lauro Santana, Bernardo Pérez, Francisco Martínez, sargento Marcos de la Rosa, Juan Lajara y Guillermo Peláez. Al pronunciarse esos y otros nombres, los presentes respondían con un presente.
