MANASSAS, Virginia (AP) Las autoridades del condado Prince William deberían prepararse para incrementar el número de familias que cuiden a los hijos de los indocumentados que quedan en el desamparo cuando éstos son detenidos en las redadas de inmigración, destacó un funcionario del condado.
El condado recientemente intensificó las medidas contra los indocumentados, al darle poder a la policía para que controle el estatus inmigratorios de las personas que detengan, aunque sea por la menor infracción, y que se les niegue los servicios del condado.
Melissa Peacor, funcionaria del condado, dijo el martes durante la presentación del presupuesto que las autoridades deben considerar el cuidado de niños desamparados ente la posible ola de deportacione que se avecina.
Muchos indocumentados tienen hijos que son ciudadanos estadounidenses porque nacieron en el país. Es uno de esos hechos que debemos exponerles, indicó Peacor. ¨Qué sucede si separamos familias? Entonces vamos a necesitar servicios con ese propósito.
Muchos inmigrantes han declarado ante la junta en octubre para instarles a que voten en contra de las medidas, al señalarles que las redadas darán como resultados la separación de familias y niños desamparados. Ese ha sido una de nuestras principales preocupaciones: ¨Qué sucede si se produce esta situación extrema?, dijo un defensor de indocumentados, John Steinbach, coordinador del grupo Mexicanos sin Fronteras. Este es otro ejemplo de los costos ocultos que no fueron considerados cuando se aprobó la medida en octubre, agregó. Steinbach dijo que muchas familias han tomado medidas para designar apoderados, a fin de que sus hijos no sean entregados a personas pagadas por el estado si sus padres son deportados. Greg Letiecq, líder del grupo Help Save Manassas , en contra de los indocumentados, que presionó para los cambios, reconoció que eso los llevaría a incurrir en gastos. La necesidad podría decrecer si los indocumentados se sienten desalentados de llegar al condado, agregó.