SANTIAGO. El Primer Juzgado de la Instrucción del Distrito Judicial de este municipio reenvió para el 18 de julio el conocimiento del caso contra Amarfis Altagracia Tavares, una supuesta manejadora de burdeles en San Cristóbal, acusada de traficar niñas en el sector de Cienfuegos de Santiago.
Luego de ser denunciada por comunitarios de Cienfuegos, Tavares fue apresada por la Policía y hace seis meses está detenida a la espera de ser procesada por el delito de trata de personas, específicamente niñas y adolescentes que eran captadas para ser explotadas sexualmente.
Contra Tavares hay una querella que sería desestimada ya que no hay víctimas para testificar.
Según las organizaciones de la sociedad civil, la acusada habría sobornado a los afectados.
Raquel Rivera, de la entidad feminista Coordinadora de Mujeres del Cibao, dijo que Tavares y la red de traficantes han ejercido presión sobre las víctimas, a las cuales supuestamente ofreció dinero para que no declararan ante los tribunales. Quienes no han tomado el dinero son presionadas y amenazadas para que no hablen. Y la única víctima que teníamos falleció a causa del Sida, que contrajo cuando fue explotada sexualmente.