POR FERNANDO QUIROZ
El Consejo Superior Policial dispuso ayer la disolución de 152 compañías de la Policía Nacional que estaban estructuradas en base un antiquísimo y obsoleto sistema, lo que obligará a más de 32,000 agentes a pasar a integrar seis áreas básicas de la institución.

Una fuente enterada de los resultados de la reunión dijo anoche al periódico HOY que los policías que pertenecían a las compañías disueltas pasarán a las filas de la Policía Comunitaria, Investigación de Crímenes, gerencia para la administración de los recursos, programa de prevención de la corrupción interna y reforma académica.

De acuerdo a la información, la reunión fue encabezada por el secretario de Interior, Franklin Almeyda, y el jefe de la Policía, mayor general Bernardo Santana Páez.

Se dijo que se adoptó la decisión, entre otras causas, porque los capitanes que dirigían muchas de esas compañías «escondían» agentes policiales bajo sus órdenes para dedicarlos a actividades privadas que le generaban beneficios económicos.  

Además, que con esta medida buscan optimizar y tener mayor control de los recursos humanos.

La decisión del Consejo Superior Policial de disolver esas compañías representa un elemento determinante en los planes de transformación de la Policía, según consideró uno de los participantes que prefirió no ofrecer mayores detalles.