El próximo domingo 20 de mayo se celebrarán las elecciones nacionales para elegir un nuevo gobierno central que dirija los destinos de la nación por los próximos cuatro años.

 En estas elecciones hay varios candidatos presidenciales y vicepresidenciales por diferentes partidos políticos, pero la realidad es que las elecciones están polarizadas entre el continuismo del PLD y el cambio representado por el PRD. Los demás, no entran en la competencia por diversas razones que no es el momento de analizarlas.

El PRD desde su fundación en el 1939 en La Habana, Cuba, es el partido de la democracia y la libertad. Su fundación fue motivada para acabar con la dictadura trujillista que gobernó este país por más de 30 años, asesinando a todas aquellas personas que disentían del gobierno, robando a mansalva y violando todos los derechos humanos.

Para acabar con esa sangrienta dictadura se perdieron valiosísimas vidas en el intento, hasta que por fin hubo el ajusticiamiento del tirano el 30 de mayo de 1961.

Es momento de recordar que el primer gobierno democrático donde se empezó a respetar los derechos humanos fue un gobierno ganado democráticamente por el PRD. Tan democrático fue que los conservadores, no acostumbrados a que gobierne la voluntad popular, conspiraron, y con un golpe de Estado destruyeron la incipiente democracia dominicana que trajo una guerra civil años siguientes.

En 1978 el PRD volvió a gobernar el país en plena guerra fría, con la URSS intacta, al igual que el muro de Berlín. Sin embargo, Antonio Guzmán estableció la democracia política definitivamente en el país hasta el presente.

El gobierno del PRD presidido por Salvador Jorge Blanco inició la democracia económica con la unificación cambiaria y la apertura del capital financiero, entre otras.

Nuevamente el PRD en el año 2000 presidido por Hipólito Mejía, inició la democracia social promulgando la ley que crea el Sistema Dominicano de Seguridad Social, construyendo miles de viviendas para los más desposeídos y abaratando los precios de los productos de primera necesidad.

El 20 de este mes, el futuro dominicano está en juego entre la dictadura de partido con el continuismo del PLD y el cambio democrático del PRD.

Nosotros los perredeístas que creemos en la libertad en todo el sentido de la palabra, hemos recorrido el país en varias ocasiones llevando esperanza a la población; hemos realizado acuerdos políticos con varios partidos y le hemos asegurado que no pretendemos destruir a ninguno de ellos, ya que son éstos el sostén de la democracia.

Hemos conformado los comités afectivos necesarios para ganar las elecciones limpiamente, como debería ser la norma de la democracia.

Hemos elaborado un programa de gobierno lo suficiente realista basado en las prioridades necesarias para enrumbar el país por el sendero del desarrollo, donde prime el incremento de la producción nacional como base para la creación de empleos; aumentar al 4% del PIB a la educación y educación técnica con el establecimiento de tantos politécnicos como sean necesarios en las provincias, para elevar la capacidad de los jóvenes a obtener ingresos superiores al salario mínimo; aumentaremos el presupuesto al Sistema Nacional de Salud para poder brindar mejor control de las enfermedades a través de la promoción y prevención, así como aumentar los asegurados a la seguridad social; iniciaremos un programa intensivo de producción alimentaria para ser auto-suficientes, abaratar los precios y exportar; asimismo, iniciaremos un programa de construcción de viviendas para los más pobres en toda la geografía nacional entre otras.

Esperamos que la voluntad popular sea respetada y tengamos un mejor país, pero para todos.