Reforma enviada al Congreso es
la anunciada por Presidente

<p>Reforma enviada al Congreso es <br/>la anunciada por Presidente</p>

POR MANUEL JIMENEZ
El secretario técnico de la Presidencia, Temistocles Montas, rechazó anoche que la reforma fiscal sometida al Congreso Nacional sea diferente a la que anunció al país el presidente Leonel Fernández y afirmó que si se ha incurrido en algún error en la redacción del proyecto el mismo será corregido en lo inmediato.

«La reforma fiscal va en los términos en que la anunció el presidente de la República», precisó Montás en una llamada telefónica desde Madrid, España, donde se encuentra en calidad de invitado para pronunciar una conferencia magistral.

Montás dijo que hacía la precisión por instrucciones del propio presidente Fernández, quien insiste en que esa reforma, en los términos que ha sido concebida, no afectará a los segmentos más vulnerables de la población.

«Esa es y ha sido la intención», dijo. Puso como ejemplo las quejas que han surgido ante la versión de que la reforma gravaría el transporte de carga. En torno a esto, reconoció que, al parecer, en la redacción del proyecto que fue enviado al Congreso hubo un desliz, «pero eso será corregido porque la decisión es no gravar el transporte de carga».

Montás dijo, además, que cualquier otro error o desliz que contenga el proyecto de reforma que no entre en consonancia con lo anunciado por el presidente, «va a ser corregido». Algunos legisladores, incluso del propio partido en el gobierno, han dicho que el proyecto de reforma fiscal enviado por el gobierno es diferente al anunciado en su discurso del lunes pasado por el presidente.

Se refieren, de manera concreta, a la creación o aumentos de impuestos que gravan los combustibles, las bancas de apuestas, los premios de loterías, los alcoholes, el tabaco, las placas y el derecho de circulación. En algún momento se habló de un impuesto al transporte de carga, advirtiendo que ello encarecería los productos básicos.

Montás dijo, sin embargo, que el contenido de la reforma fiscal se ajusta a lo que anunció el presidente Fernández y que en caso de que en el proyecto se deslizara algún error, será corregido de inmediato.

Fernández habló por segunda vez el lunes pasado al país para explicar el detalle la reforma fiscal con la que el gobierno espera obtener recursos equivalentes al 1.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), es decir unos RD$17,500 millones.

Una suma similar el gobierno busca lograrla a través de un plan de austeridad que incluye la reducción de los salarios de los altos funcionarios de la nación, encabezado por el propio presidente de la Republica, cuyo sueldo será reducido en un 25 por ciento.

Con estas medidas, la administración de Fernández busca cumplir con las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), en el sentido de que el gobierno debe tener para el año entrante un superávit fiscal equivalente al 3% del PIB.

La nueva propuesta de reforma ha sido recibida con reacciones diversas por el empresariado y los partidos políticos de la oposición. Un sector del empresariado la ha apoyado, otro sostiene que algunos ingresos previstos han sido subestimados, en tanto que los partidos de oposición con representación congresional han advertido que se opondrán a la iniciativa.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas