El sistema de partidos políticos en la República Dominicana está sumido en una crisis profunda de identidad, debido a que ninguno se sustenta en una base ideológica y están desconectados totalmente de la sociedad.
Así lo considera Frank Martínez, Secretario Nacional Electoral del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), quien pone como ejemplo al Partido de la Liberación Dominicana (PLD) que nació abrazando el marxismo leninismo, pero que una vez asumió el poder ya solo queda el nombre.
Martínez, quien fue senador y diputado por la provincia La Romana, advierte que esa situación pone en peligro la institucionalidad democrática de la nación, ya que son estas instituciones las que dominan los poderes del Estado.
Cita como ejemplo que el PLD de hoy está totalmente desnaturalizado y ha perdido el concepto sobre el manejo de la administración del Estado.

Señala que con miras a las próximas elecciones el gran reto de las organizaciones políticas es qué hacer para obtener una buena cantidad de votos y qué calidad de oferta van a presentar al electorado que los conecte con sus necesidades. Alerta sobre la debilidad institucional de la República Dominicana, lo que se expresa en la intervención de un poder del Estado sobre otro, lo que es muy peligroso. Sostiene que todavía en el país vive el monstruo, el persecutor de una reforma a la Constitución que existe desde la misma fundación de la República hasta el día de hoy.
Señala que uno de los retos del sistema de partidos es si blindará la Constitución o, si por el contrario, la Carta Magna seguirá a merced de coyunturas, apetencias o desvaríos de la clase política.
Indica que la Constitución será un pedazo de papel, siempre y cuando no haya hombres y mujeres para defenderla. Estima que los partidos políticos se ven estropeados en sus planes debido a que el mesianismo o liderazgo único vertical es el que domina.
Considera que estos instrumentos de la democracia tienen que sustentarse en un liderazgo colectivo, de lo contrario les espera un futuro incierto.