A dineros dados, brazos quebrados.
Al hijo malgastador, barro en la mano.
Brasa trae en el seno la que cría hijo ajeno.
Cada maestrillo tiene su librillo.
Calle el que dio y hable el que tomó.
Calle el que tiene por qué.
Calza como vistes, y viste como calza.
Consejo de padre, guárdelo bien el hijo con llave.
De sabios es meter, de locos acometer.
El buen paño en el arca se vende.
El cuerdo y la cuerda, el mal ajeno castiga.
El oro manchado, y el mozo, castigado.
El sombrero, hasta el suelo; el repelón, hasta el cielo.
En la mesa y en el juego se conoce al caballero.
Errando, errando, se va acertando.
Haz bien y no mires a quién.
Hijo del bueno, para malo y para bueno.