¡Refrescando la casa!…

¡Refrescando la casa!…

Si bien es cierto que en nuestra “media isla” el verano parece ser eterno, en agosto es cuando sentimos con más fuerza el paso de esta estación y con ella el calor sofocante. Nuestro hogar siempre es refugio a donde llegar tranquilo a descansar al final del día por lo que debemos mantenerlo lo más fresco posible en estos días, y podemos hacerlo ayudándonos de algunos cambios en la decoración.
Los espacios nos inspiran inmediatamente entramos a ellos, pues la combinación de colores y elementos nos transmiten sensaciones. Con esto en mente lo ideal para refrescar la temperatura sensorial es irnos por los colores claros, éstos atraen menos luz y nos da la impresión de espacios más abiertos.
No por esto tienes que limitarte a los blancos y beiges, pues amarillos, verdes y lilas tienen su versión más clara que permite jugar con los colores manteniendo la claridad y la apertura. Los tonos rosa y naranja pueden ir muy bien pues es una época asociada a la diversión y el toque alegre que llevan siempre es bienvenido.
Cuando hablamos de telas tenemos que irnos por las más naturales, algodones, hilo y lino. Nada de telares muy pesados en las cortinas, los visillos mantienen la privacidad y resultan bien frescos. Igualmente cuidado con los estampados muy cargados pues visualmente resultan pesados y la idea es refrescar también lo que vemos.
Guarda las alfombras de mucho pelo y sal a buscar las de yute y fibras naturales, aunque no lo parezca de un principio se nota mucho la diferencia. Si tienes miedo de que tus áreas parezcan una estampa de hotel caribeño, también hay lindas alfombras de algodón que no resultan tan pesadas.
Trae las plantas a casa, son aliadas perfectas del frescor, úsalas en maceteros de piso, colgantes y trae naturaleza al interior. Además de verse lindas oxigenan y purifican los ambientes. Hasta en los cuadros e imágenes que cuelgas en las paredes pueden ser de gran ayuda. Si es tiempo de renovar algún mueble o tienes establecido comprar algunos, vete a los colores claros o vibrantes, además de que están súper de moda recrean atmósferas ligeras y agradables. Mantén el orden, no recargues los espacios pues si todo está en su lugar y tienes espacios libres, se siente que el área respira y visualmente limpia el entorno.

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