Los refugios construidos por la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (OPRET) hace casi tres años a orillas del río Isabela se deterioran, debido a que la humedad ha podrido la madera, la vida útil de los baños expiró, y las aguas negras corren dentro y fuera de los hogares.
Ante tal situación, las autoridades de la Opret han respondido a los desalojados del Hoyo de la Zurza que no hay dinero para construir las viviendas, como se les prometió cuando tumbaron las suyas para dar paso a la vía Perimetral.
En diciembre del año pasado, la Opret y el Instituto Nacional de la Vivienda (Invi) entregaron 40 apartamentos a igual cantidad de desalojados y dejaron 138 pendientes para proyectos venideros, futuros.
De las 138 viviendas, 50 son ocupadas por refugiados en la margen del Isabela, cerca del puente Presidente Peynado, que une al Distrito Nacional y a Villa Mella, en Santo Domingo Norte.
Una segunda etapa, de 16 apartamentos, lleva más de tres meses terminadas, próximo a la escuela Aida Cartagena Portalatín, pero no han sido entregados a los desalojados, lo que ha generado incertidumbre, ante el rumor de que compañeros del PLD andan tras los apartamentos.
Una tercera etapa que era construida detrás de los apartamentos de la Zurza, ni siquiera ha sido comenzada.
Francisco Reyes, dirigente comunitario, recordó a la Opret su compromiso con los desalojados cuando iniciaron la vía Perimetral, que no dejarían que los verdaderos dueños de los apartamentos fueran engañados por los políticos que merodean las 16 viviendas que no han sido entregadas.
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Un infierno
Yolanda Ramos, quien habita uno de los refugios, narra que la vida en ese lugar es un infierno, por lo que ya sus pecados fueron purgados en esa vivienda, cuyo sanitario está conectado al Isabela. Asimismo, Yuberkis Manzueta, madre de cinco niños, y Gregoria Marrero, de cuatro, denunciaron que los niños no duermen, que sufren de congestionamiento y que la fiebre persiste, debido a la insalubridad.