Por JOSE CACERES
El ex-grandeligas, Reggie Jackson, aseguró ayer que el tercera base del equipo, Alex Rodríguez, se le exige mucho en el terreno de juego y eso le está afectando en su carrera. Jackson, quien visitó el país por un par de días, afirmó que cuando Alex Rodríguez dispara 40 jonrones y remolca 130 carreras, la gente entiende que debió tener mejores números.

“Creo que Alex debe tener mayor concentración en el juego y seguir produciendo para los Yanquis”, adujo el ex-jardinero de los Yanquis en la década de los años l970.

Charla a novatos

Reggie Jackson tuvo una dinámica de trabajo con más de 60 novatos que están firmados por los Yanquis y están concentrados en el complejo de Boca Chica.

“Quería hablar con estos muchachos que son una joya y que tuvieran sus familiares para hablar sobre el comportamiento de los jugadores y hacerle saber el mundo en que se encuentran”, adujo Jackson.

Manifestó que le gusta hablarle a los jóvenes para que conozcan que están en un negocio bien lucrativo, pero que hay que trabajar las 24 horas del día.

Contento en el Quisqueya

Dijo que el pasado domingo visitó el Estadio Quisqueya y vio un juego de Licey y Escogido y pudo ver el entusiasmo de los fanáticos.

“Así mismo era en los años de los 70 y me recordé cuando trabajé en Puerto Rico con Santurse en la pelota de invierno”, subrayó Reggie.

Jackson visitó el pasado domingo el Palco VIP de los Tigres del Licey, invitado por el presidente  de los  felinos el empresario y deportista José Manuel-Pepe-Busto, además Fernando Ravelo, gerente general y el vocal Rafael Ubeda Heded.

El destacado atleta que nació en 1946, en Wyncote, Pensilvania, presenció el juego entre los Tigres y los Leones, en el estadio Quisqueya.

Desde que los fanáticos notaron la presencia del destacado jugador de las grandes ligas se acercaron para la firma de bola, autógrafos y gorras.

Jackson, quien estuvo acompañado de Junior Noboa, se sintió muy a gusto en el viejo parque del ensanche La Fe.

El inmortal de Cooperstown jugó para los Atléticos de Oakland, donde formó parte de la maquina verde, contando con la presidencia de Charlie Finley, quien realizó un gran esfuerzo para integrar un equipo batallador para ganar la Serie Mundial.

Jackson jugó en el país, durante la visita de los Yanquis de Nueva York, en un partido correspondiente a los entrenamientos de  Grandes Ligas, durante la década del 80.

Durante su brillante carrera en las mayores,  participó en 2, 820 partidos, con 9, 864 turnos al bate; con 1, 551 carreras anotadas; 2, 584 imparables, 463 dobles, 49 triples, 563 jonrones , 1, 702 carreras empujadas y se ponchó en 2, 597 veces.