POR LLENNIS JIMÉNEZ G.
La Sala Capitular del Distrito Nacional sólo ha sesionado en tres ocasiones en lo que va de este año y las últimas dos asambleas debieron ser suspendidas por la ausencia de la mayoría de los regidores, que están más dedicados a sus proyectos políticos que a las tareas de la ciudad.

El pasado viernes tampoco se pudo sesionar y el presidente de la Sala Capitular, Gabriel Castro, dijo que la mayoría de los regidores abandonó su trabajo, están inoperantes dentro de las comisiones de estudios y alegan no conocer la agenda del día para evitar participar en las sesiones.

Mientras una fuente de entero crédito informó a redactores de HOY que regidores de los distintos partidos políticos y en especial del PRD, piden que las convocatorias a las sesiones no sean publicadas en las agendas de los medios de comunicación, para que los periodistas no asistan.

Algunos se ausentan para dedicarle tiempo a sus proyectos políticos y coordinar actividades proselitistas de candidatos y precandidatos a la presidencia de la República.

En tanto, Castro adelantó que publicará los nombres de los regidores que no asisten a su trabajo, muchos de los cuales dijeron el viernes que no conocían cinco de los nueve puntos pendientes desde hace 15 días.

Señaló que entre 12 y 15 regidores son los que acuden a las sesiones, de una matrícula de 36.

Expresó que revisará el reglamento interno de la Sala Capitular, para adoptar medidas contra los ediles que tienen paralizado el trabajo de las comisiones.

Sostuvo que un regidor cobra un honorario de RD$84,000, más RD$3,000 para la gasolina.

Declaró que el desinterés es tal, que la regidora Tania Báez, quien preside la Comisión de Medio Ambiente, dijo que tenía dificultad para integrar a los miembros, dado que no asisten al cabildo.

Castro opinó que los regidores no pueden argumentar que su inasistencia se debe a su responsabilidad política, ya que él está inmerso en el trabajo de la precandidatura presidencial de Danilo Medina, y contrario a descuidar sus labores en la presidencia del Ayuntamiento, acude diario a atender sus asuntos.

El viernes quedaron pendientes importantes temas para la ciudad de Santo Domingo, como la decisión de un área verde en Los Farallones de Cristo Rey; la investigación de una construcción en la Ciudad Colonial.

También fueron dejados en los escritorios de los regidores informes para decidir sobre la recuperación de un solar del patrimonio municipal, en la calle Nicolás de Ovando; la aprobación de un uso de suelo y un informe de pensiones y jubilaciones. Así como un proyecto para regular el expendio de alimentos y bebidas en las vías públicas, y un informe para intervenir a nivel municipal en la defensa de los negociantes del Malecón Libre de la avenida George Washington.

Como paradoja de la actitud de los regidores, para la sesión de ayer se tenía previsto que la Sala Capitular conocería una propuesta para la contratación de un seguro internacional y de vida para los regidores, enviada por Federico Villanueva. Pero ni siquiera se dignaron en legislar para su provecho, tal vez, porque su accionar es más bien local.

No obstante, de aprobarse esta resolución, los regidores tendrían el privilegio de tener dos seguros, uno local y uno internacional, además de la póliza de vida. El beneficio les llegaría en momento en que se cuestiona su holgazanería.