POR MARIO MENDEZ
La aplicación del reglamento de evaluación de activos implicará un cambio radical en la forma como opera el sector financiero, trascendió ayer. De acuerdo a lo explicado, muchas empresas que tradicionalmente han tenido acceso a créditos, podrían ver seriamente limitadas sus posibilidades para calificar para nuevos préstamos.

Esto así porque, según se explicó, con la aplicación de ese nuevo reglamento el único estado financiero válido para el banco, al momento de evaluar una solicitud de crédito, es el que se presente a la Dirección General de Impuestos Internos, o sea que ya las empresas que acostumbraban a tener doble contabilidad no podrán presentar un estado financiero a la banca diferente del que presentan para el pago del impuesto sobre la renta.

Esto quiere decir, según se indicó, que si una empresa presenta un estado financiero con pérdidas a la Dirección General de Impuestos Internos, al momento de solicitar un préstamo tendría dificultades para que le sea aprobado e incluso pudiera no calificar, aunque tradicionalmente haya tenido fácil acceso al crédito bancario.

«Muchas empresas, especialmente aquellas que podía obtener créditos bancarios con mucha facilidad, todavía no han hecho conciencia de las implicaciones que para su negocios tendría la aplicación de este nuevo reglamento», se explicó.

Se agregó que con la aplicación del nuevo reglamento, el crédito se evaluará principalmente en función de la capacidad de pago del proyecto a ser financiado, no de la cantidad de garantías que pueda presentar el solicitante del financiamiento.

Se explicó que si se determinara que el proyecto es rentable y tiene flujo de efectivo que le permite ganar y pagar, no habría dificultades para calificar positivamente el préstamo.

De lo contrario habría problemas porque ya la presentación de una garantía por sí sola no es tan importante para calificación del riesgo.

Se indicó que un solicitante de un crédito que cuenta con muchas garantías pudiera tener dificultades para obtener el préstamo y si lo obtuviera tendría que pagar una alta tasa de interés, en el caso de que se determine que el proyecto en que va a ser utilizado el financiamiento no es rentable o no va a contar con un flujo de efectivo que le permita pagar.

Se indicó que en segundo lugar, después de la capacidad de pago del proyecto, se tomará en cuenta el historial de pago del solicitante del crédito, al momentar del banco calificar el riesgo.

«Con la aplicación del reglamento, a un solicitante de crédito mala paga le va a ser muy difícil obtener un crédito, aunque pueda presentar garantías», se indicó.

Se explicó que las garantías presentadas tendrá una importancia menor que la capacidad y el historial de pago.