Dos largos meses de confinamiento en cuarentena, toque de queda, reclusión obligatoria y voluntaria, han sido suficientes para que las personas, adultos, jóvenes, adolescentes y niños hayan experimentado diversas conductas en la convivencia del día a día, debido al cambio que, de la noche a la mañana, “volteó” el rumbo y la rutina de la gran mayoría en todos los sentidos.
Las escuelas dejaron de operar, se paralizaron los centros de trabajo -salvo algunas excepciones-, muchos fueron suspendidos de sus empleos, los ingresos se redujeron a su mínima expresión, cerraron parques, cines, teatros, clubes, plazas comerciales, bancos… Fue una especie de “blackout” general que trajo como consecuencia desesperanza, desorientación, tristeza, y en algunos incluso desórdenes psicológicos, con presencia de depresiones, irritabilidad, ansiedad, incertidumbre…
Y ver y escuchar cada día las noticias de cómo avanzaba la pandemia, tanto a nivel global como en el país, perder a familiares, amigos, allegados, conocidos, producto del contagio con el virus, han sido aspectos fuertes que era inevitable que empeorasen la situación. Tener que experimentar la dura realidad de no poder dar el último adiós al ser querido fallecido, el abrazo y palmada en la espalda al amigo que perdió a un ser querido, no poder dar cristiana sepultura a los muertos… es uno de los aspectos que ha marcado a muchas personas.
Ante esta crisis sanitaria mundial que ha doblegado a todos, sin importar raza, religión, clase social o edad, a regirse por el mismo camino, el mismo protocolo, a tener las mismas dificultades para obtener servicios, productos… consultamos a un profesional de la conducta interesados en ofrecer algunas de las reglas de comportamiento que deberíamos asumir para convivir con la COVID-19, partiendo de que las autoridades gubernamentales han empezado a flexibilizar el confinamiento y el toque de queda, con la apertura gradual y escalonada del país.
Conversamos en línea con la psicóloga clínica y terapeuta familiar Zuleyma Rosario, quien nos comentó que considera positivo que, luego de más de dos meses de inactividad, se empiece a retomar la normalidad en convivencia con esta enfermedad.
“Luego de dos meses de confinamiento ha llegado la hora de ir retomando la cotidianidad, o como bien dicen ahora, la ‘covidianidad’, y lo cierto es que no resultará tan sencillo, pues han cambiado muchas cosas, ha habido desde pérdidas de familiares o amigos, a pérdida de empleo o reducción de los ingresos, y todo esto puede generar incertidumbre, ansiedad o tristeza. Esto, sin dejar de lado que aún continúa la lucha contra la pandemia, y que tenemos que adaptarnos a vivir con ella, cuidarnos y cuidar a los demás.”
Reglas de oro para afrontar esta nueva forma de convivencia con la COVID-19: aquí las recomendaciones de la especialista.
1. Es importante tener una actitud positiva. Esto es vital en estos momentos, pues hay que recordar que “hemos sobrellevado otros momentos difíciles y que esta situación como todas será pasajera”, afirma Rosario.
2. Es necesario ser tolerante, tanto con uno mismo, como con los demás; recordar que se debe ir despacio, ya que es un nuevo proceso de adaptación y que se presentarán obstáculos. Hay que ser amable y paciente, recomienda Zuleyma.
3. En estos momentos se requiere practicar la gratitud. “El simple hecho de estar vivos y tener que salir de casa a un lugar que espera por nosotros es motivo de gratitud, por mencionar solo uno; te invito que hagas tu propio listado de cosas por agradecer”.
4. Se deben identificar las enseñanzas que ha dejado esta cuarentena. “Todos hemos aprendido de este proceso, ¿cuál ha sido tu mayor aprendizaje durante estos días?
5. Hay que organizar el tiempo. El sentirse con cierto control y planificación le ayudará a disminuir la ansiedad al retomar sus actividades.
6. Mantener hábitos saludables, como el descanso suficiente. Tomar agua, hacer ejercicios y tener una buena alimentación. Respirar aire puro es una excelente práctica antes de iniciar las labores diarias. Recordar siempre mantener las medidas de distanciamiento e higiene, ya que aún se está en medio de la pandemia.
7. “¡Diviértete! No olvidemos ir retomando también la sana diversión, poco a poco. De la mano de nuestras autoridades tendremos la oportunidad de volver a lugares de recreación. Mientras tanto hay que ser creativos”, concluye Zuleyma Rosario, psicóloga clínica y terapeuta familiar, quien está en Instagram como @zuleyma_rosario.