POR LEONORA RAMÍREZ S.
“Ha vuelto el patriarcado al CONEP” con esa frase despidió José P. Monegro, subdirector de El Día, a los miembros de esa entidad empresarial que hasta hace unos meses era dirigida por Elena Villeya de Paliza.

A Lisandro Macarrulla, presidente de la misma, y a Manuel Diez, presidente de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD) no les quedó más que reír a carcajadas mientras Maribel Gassó, integrante del comité ejecutivo del CONEP, destacó que eso no es así porque en esa institución hay equidad de género.

Pero en carcajadas no transcurrió en encuentro del Grupo de  Comunicaciones Corripio, porque los chicos ácidos dieron sus golpes bajos con respecto al delicado tema de la seguridad social y a las empresas que, habiéndole descontado a sus empleados las cotizaciones de la seguridad social, no transfieren esos recursos a la Tesorería de la Seguridad Social.

Macarrulla dejó claro que al organismo rector es al que le corresponde reclamar y someter a la justicia en los casos que sean necesarios, pero resaltó que el CONEP no apoya las violaciones a la ley.

“Pero a mí la Policía no me tiene que decir que no robe, yo sé que no debo robar”, le dijo una chica ácida en busca de otras argumentaciones.

Diez sacó la cabeza y planteó que “que los empresarios no pueden ser policías, en el sentido de presionar a los propietarios de  negocios para que paguen las cotizaciones, para eso están las entidades de control que son las reguladoras del sistema”.

Empresas privadas e instituciones del Estado adeudan a la Tesorería de la Seguridad Social alrededor RD$4,000 millones por concepto de las cotizaciones que les descuentan a sus empleados.

Hasta el 31 de diciembre del 2006 aproximadamente 60 entidades gubernamentales adeudaban más de RD$1,000 millones al Sistema Dominicano de Seguridad Social (SDSS), alrededor de 800 empresas deben más de RD$1,500 millones, y en tal sentido la citada entidad sometió a la justicia a 24 negocios y notificó a 138 mediante actos de alguacil.

UN HOMBRE DE DERECHAS

Monegro dejó claro ayer que su ideología fluctúa entre la derecha y la ultra derecha de la iglesia católica, con cierta filiación en la rama militar siempre que esté en la línea de Augusto Pinochet y sus aportes al fortalecimiento económico de Chile, pero bastante lejos del presidente venezolano Hugo Chávez. Al finalizar sus disquisiciones admitió que se pasó de la raya, pero ya era tarde…

Los chicos del CONEP gozaron un mundo con sus planteamientos, pero no tanto cuando se referían al futuro del sistema eléctrico del país. Lamentaron que tengan que pagar el kilovatio hora a 25 centavos de dólar, mientras sus competidores regionales les llevan mucha ventaja en ese contexto.

En tal sentido, Macarrulla consideró que los subsidios al servicio eléctrico y al GLP deben focalizarse, porque no deberían beneficiarse personas que tienen  una posición económica bastante holgada.

YA VIENE EL LOBO, YA VIENE EL DR CAFTA

Los empresarios analizaron las mil y una condiciones (necedades para un chico ácido) que reclama el gobierno norteamericano para que en el país se implemente el Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana (DR-CAFTA).

Que si la corrupción, que si la industria farmacéutica, que si las compras gubernamentales y la transparencia….para los empresarios ya es hora de que se solucionen los conflictos faltantes porque no puede ser que sólo se beneficie Estados Unidos de ese convenio. ¿Y desde cuando la sardina se traga al tiburón?

EL VILLANO FAVORITO

Gassó es un gallito de pelea cuando de defender a su sector se trata, y así quedó evidenciado cuando se expresó acerca de la Seguridad Social y de las pérdidas de los empresarios por la permanente crisis del sistema eléctrico.

Ante la provocación de un chico ácido que planteó que la clase media subsidiaba no sólo a los pobres, sino también a los empresarios, ésta respondió que “el villano favorito somos los empresarios, pero ya está bueno”.

Un chico ácido que no pierde tiempo susurró que una imagen no se borra de la noche a la mañana.