LIMA, AFP. La reina Máxima de Holanda, de visita en Perú, abogó este viernes por el apoyo de las entidades financieras a los pequeños emprendimientos al demandar que los créditos se extiendan a zonas rurales y a comunidades de bajos ingresos para promover la inclusión.

En un discurso al clausurar el evento «Mujer empresaria, inclusión y futuro», organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la esposa del rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos, afirmó que muchos peruanos, hombres y mujeres, «se lanzan a la actividad comercial por necesidad para mantener a sus familias, sin contar con los servicios financieros adecuados».

La reina Máxima, de origen argentino y representante especial del secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, subrayó que si realmente se quiere ayudar a los emprendedores peruanos de sectores de bajos recursos «la meta debe ser el acceso y uso de servicios financieros diversos a cargo de instituciones sustentables y responsables».

Acompañada de la primera dama peruana, Nadine Heredia, y líderes de asociaciones de mujeres, la reina Máxima dijo que se sintió «muy conmovida» cuando el jueves visitó el barrio pobre de Huaycán, al este de Lima, donde conoció a ocho mujeres que «crearon un grupo informal de ahorro y préstamo para ayudarse mutuamente e iniciar pequeños emprendimientos, generar mayores ingresos y hacer frente a emergencias».

Según señaló, en Perú las pequeñas empresas y microempresas representan el 40% del producto interno bruto y el 60% del empleo formal, y constituyen una columna vertebral en el sostenimiento familiar en un país con un 25% de pobreza extrema.

Antes de concluir su visita a Perú en la noche del viernes, Máxima fue recibida por el presidente Ollanta Humala en el Palacio de Gobierno en una reunión en privado.   La reunión tuvo «por objeto conocer de cerca los programas de inclusión financiera que se desarrollan en Perú, en el marco de la política de inclusión social que el gobierno lleva adelante», señaló la secretaría de la Presidencia.

Desde 2009, la reina Máxima es representante especial del secretario general de la ONU para el Financiamiento Inclusivo a favor del Desarrollo (UNSGSA, según su sigla en inglés).