WASHINGTON, (EFE).- El vicepresidente estadounidense, Dick Cheney, acusó ayer a Irán de ser un obstáculo para la paz en Oriente Medio, y le advirtió que ni EE.UU. ni la comunidad internacional le permitirán hacerse con un arma nuclear.

El vicepresidente hizo estas declaraciones durante una conferencia en el Instituto para Estudios sobre Oriente Próximo de Washington, en el que relató los esfuerzos soterrados que está haciendo Irán para “ganar tiempo”, de cara a lograr la tecnología nuclear a la que aspira.

Esta misma semana, el presidente de EE.UU., George W. Bush, se refirió al mismo asunto, y advirtió a la comunidad internacional de una posible III Guerra Mundial si Irán adquiere “los conocimientos suficientes como para fabricar un arma nuclear».

“Si Irán tuviera un arma nuclear, sería una amenaza seria a la paz mundial”, dijo Bush el pasado miércoles.

Ayer, el vicepresidente Cheney denunció los “obvios” esfuerzos de Irán para “desarrollar la tecnología necesaria para construir un arma nuclear”, mediante “engaños».

“EE.UU y la comunidad internacional no pueden permanecer al margen mientras un país que apoya el terrorismo cumple su ambición más agresiva”, dijo en la conferencia.

Irán es “el patrocinador del terrorismo más activo del mundo”, indicó.

Además, el vicepresidente señaló que “si el régimen iraní continúa con el rumbo actual, la comunidad internacional se preparará para someterlo a serias consecuencias».