La Habana(EFE).- Las nuevas críticas de Cuba contra la UE, a la que acusa de ser “lacayo” de EEUU y mantener una “alianza patética” con Washington, suponen un nuevo capítulo en el proceso de deterioro de las relaciones bilaterales tras la crisis del 2003. 

Un amplio editorial publicado ayer en la primera página del diario oficial “Granma” bajo el título: “Es muy poco el poder de los lacayos”, arremete de nuevo contra el bloque comunitario y su papel en la reciente cumbre EEUU-UE, celebrada en Viena el pasado día 21.

A dos meses de asumir la presidencia del Movimiento de Países No Alineados durante la Cumbre que se celebrará en septiembre en La Habana, Cuba vuelve a marcar distancias con la UE acusándola de mantener una “vergonzosa doble moral” en materia de derechos humanos y de “subordinarse” a la política a EEUU contra el Tercer Mundo.

Cuba considera que en la declaración final de la reunión de Viena Estados Unidos y sus socios europeos “se recrean en su afición a invadir la soberanía de otros”, esquivando temas como la situación de los presos en la base de Guantánamo o los vuelos secretos utilizados por EEUU para el transporte de sospechosos.

“Pero lo nuevo en esta Cumbre es que esa vieja política de subordinación y doble rasero se constituye en posición oficial y pública de la Unión”, afirma “Granma”, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba (PCC).

Viena fue “la Cumbre de un solo lado del Atlántico. Europa cedió cobardemente en todo”, continúa el diario, que asegura que Cuba “no podía dejar de ser objeto de esta conspiración trasatlántica” y que el “imperio” comprometió “hasta el ridículo” a sus aliados europeos en su cruzada contra la isla.

En un “nuevo, bochornoso y cínico capítulo de sometimiento a los dictados de Washington”, añade, la UE ha incluido por primera vez en un documento conjunto con EEUU su “preocupación por la situación de los derechos humanos en Cuba”, mientras la Casa Blanca intensifica el bloqueo, no descarta la opción militar y proclama su política de “cambio de régimen” en el país.

“La UE debería aclarar si esto significa que ha decidido sumarse al Plan Bush contra Cuba y si ahora, además de coincidir con los fines, coincide también con los métodos fascistas que éste aplica. Desprecio es lo que merecen ambos por parte de Cuba”, advierte el diario.  Cuba asegura que no le “sorprende” la “pérdida de recato” de una UE, que, según “Granma”, sufre “una grave crisis de legitimidad e identidad y que nunca ha sido más débil y dependiente de Estados Unidos que en la actualidad”.

“La alianza de la Unión Europea con (el presidente de EEUU, George W.) Bush es patética. No tienen la autoridad moral ni la capacidad de dictarle condiciones o imponerle decisiones a Cuba. No lo ha podido el propio imperio. Es muy poco el poder de los lacayos”, insiste.

El órgano oficial del PCC critica también las sanciones diplomáticas adoptadas por la UE en el 2003 en protesta por la ejecución de tres secuestradores y las condenas a 75 disidentes -y ahora en suspenso- para subrayar su “ridículo fracaso” y denunciar que los miembros del bloque “no han tenido la dignidad de reconocer el error y eliminarlas definitivamente”.

La declaración cubana, según diplomáticos occidentales consultados por EFE, pone en evidencia el nulo interés de La habana por mejorar las relaciones con la UE, que todavía no se han recuperado de la crisis del 2003.

En respuesta a las sanciones adoptadas entonces por los europeos, La Habana congeló los contactos con los diplomáticos comunitarios acreditados en la isla.

Las relaciones se normalizaron oficialmente en enero del 2005, tras la suspensión temporal de las sanciones aprobada por Bruselas.

Sin embargo, según las fuentes consultadas, desde entonces los contactos no han recuperado fluidez y son varias las “señales” lanzadas por el Gobierno de La Habana sobre su escaso interés por impulsar las relaciones bilaterales.