Amar y ser amado es la aspiración de todas las personas a lo largo de la vida.
Sin embargo, en la búsqueda de esa persona ideal, es posible encontrarse con alguien posesivo que se crea dueño o dueña de su pareja, minimizando su vida de una manera total.
Por lo general, el miembro posesivo de la relación, tratará por todos los medios limitar la libertad de su pareja, cambiar su forma de ser, alejarla de sus amigos…
Sylvia Patricia Chabebe, psicóloga clínica y terapeuta familiar y de pareja, explica que el comportamiento posesivo es una forma de celos agravada, mucho más destructiva y peligrosa que involucra una serie de conductas que atentan directamente contra el equilibrio emocional, libertad e integridad física de la pareja, por lo que no es, ni debe considerarse un comportamiento “natural”.
Explica que el sentimiento de posesión es enfermizo y puede manifestarse en forma de maltrato psicológico, por lo que la víctima queda anulada para ver la realidad.
Detalla que los celos derivan una cadena de emociones negativas como el ser posesivo, impulsivo, apasionado, ansioso, sadomasoquista o hasta neurótico.
“Para una persona celosa y posesiva las explicaciones nunca son suficientes ni se convencen del todo, siempre queda una duda por lo que constantemente buscan el control total de la pareja, así como también evidencias que comprueben que están en lo correcto. Al mismo tiempo, esta necesidad de control hacia la otra persona, impulsa más a esta a demostrar su autonomía, a alejarse” especifica la especialista.
Chabebe señala que existen muchas situaciones en las cuales los celos y el ser posesivo son más que amor o miedo a la soledad. “Es una manifestación de otra problemática en la pareja, algo más profundo que puede llevar a los miembros de la pareja a encontrarse en una relación tóxicas, o peor aún, romperla del todo” advierte.
La terapeuta especifica que una buena relación de pareja se basa en la ternura, comunicación, comprensión, tolerancia y respeto a la autonomía del otro, por lo que no se debe tolerar este tipo de comportamiento.
¿Qué hacer para cambiar este tipo de comportamiento? Ante todo se debe tener presente que ocultar el sufrimiento y negarlo hace que este aumente cada vez más, por lo que es básico que se le comunique el sentir a la pareja, explicándole detalladamente qué conductas han llevado a sentirse así y esto llevará a que se fortalezca la comunicación y confianza, e incluso las relaciones íntimas.
De igual forma, es importante trabajar en la propia autoestima. “Aprende a confiar en ti mismo, a ser objetivo y así poder diferenciar lo real de lo que creemos, es decir, tomar conciencia del problema y respetar la autonomía y espacio de la pareja, no lo culpes de tus sentimientos” dice la experta.
La desconfianza es una de las principales faltas que se pueden cometer en una relación. Esta provoca no sólo celos sino también que se quiera tener a la persona todo el tiempo para uno, llegando los hábitos a convertirse constantemente en dinámicas destructivas dentro de la relación.
“Hoy en día, debido a todas las informaciones falsas que recibimos a través de los medios y las redes sociales, es muy fácil confundir el amor con cualquier otra actitud, sobre todo cuando viene de nuestra pareja”, señala Chabebe.