Relato de un asalto en el Faro

Relato de un asalto en el Faro

Rafael Danilo Grullón
Mi nieta Judy Tyson, su esposo Lance Tyson y su bebé Isabelle, están de visita en República Dominicana. Es su segundo viaje al país después que ella casó con Lance, quien es oriundo de Loussiana. Ellos sirven al Señor.

El  viernes en la tarde, el esposo de Judy, quien diseñó un itinerario que incluía conocer los sitios históricos, decidió conocer el Faro a Colón. Yo, quien por razones de «vejectud», no me sentí animado a acompañarlos, porque eso implica caminar más de lo que mi cuerpo soportaría con éxito, les advertí que tuvieran mucha cautela, pues según leí en la prensa, dos días antes, en los alrededores del faro existía un ambiente de delincuencia y asaltos a turistas.

 Se fueron, no sin antes dejarme muy preocupado.

En efecto, a eso de las 6:00  recibo una llamada de Judy, informándome con voz entrecortada y llorosa que fueron asaltados por tres mozalbetes armados de cuchillos. Judy, quien está en avanzado estado de gestación, en el asalto rodó por el suelo en forma aparatosa y peligrosa para la criatura.

No le valió pedir auxilio, no apareció un agente del orden para auxiliarlos. Por lo que considero un «milagro de Dios», no lograron quitarle más que la cámara, porque no les dio tiempo de tomar carteras, celulares, etc. Judy sufrió algunas laceraciones y heridas menores. Al llegar a casa, la llevé a emergencia, de la Clínica Gómez Patiño. La examinaron cuidadosamente, incluyendo sonografía, que determinó, gracias al Señor, que la criatura no fue afectada con la caída de Judy. Te informo esto por si fuera posible alertar por el periódico de lo que está pasando en los contornos del Faro, a fin de que las autoridades, que saben del asunto, pongan una vigilancia continua en el sector.

Me informó Judy que había militares no muy lejos de ahí, pero estos «no se dieron por entrados». La impresión que da es que existe «cierta» complicidad, porque no se explica cómo ocurren estas cosas en las mismas narices de las fuerzas del orden.

Zoom

Hasta adentro…

Los ladrones no perdonan ni siquiera el  interior del monumento:   la semana pasada se robaron  20 lámparas  de las escaleras  que dan acceso al segundo piso.

Más lámparas

El 26 de abril se denunció que habían sido robadas 52 lámparas.

El más famoso

El 13 de septiembre de 2011  se robaron  un arcabuz (arma de fuego antigua utilizada por la infantería europea) con  valor de RD$4 millones. La pieza fue recuperada.

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