NUEVA YORK. AP. La dirigente de la organización de monjas más grande de Estados Unidos refutó el lunes las razones que dio El Vaticano para sancionar a su grupo y rechazó una vez más la noción de que sea una rebelión cuestionar la doctrina eclesiástica.
La hermana Pat Farrell, presidenta de la Conferencia de Liderazgo de Religiosas, afirmó que los católicos deberían poder buscar respuestas sobre su fe sin temor. No creo que este sea un ambiente sano para la Iglesia, manifestó Farrell en una entrevista por teléfono. Podemos utilizar este hecho para hacer que las cosas avances en esa dirección, donde sea posible plantear interrogantes que no sean vistas como un desafío o rechazo. Farrell se pronunció sobre el asunto por primera vez desde que la semana pasada se reunió con la oficina responsable de la ortodoxia vaticana, la Congregación para la Doctrina de la Fe.