Remedios  caseros  contra los virus y bacterias

Remedios  caseros  contra los virus y bacterias

POR MARGARITA QUIROZ
La semana que recién finaliza estuvo matizada por mucha humedad. Fuertes lluvias, calles inundadas, brisa y salidas repentinas de un candente sol, trastocaron el ritmo cotidiano de cientos de  dominicanos que, por diferentes razones, se vieron obligados a salir de sus hogares. 

Esta semana el sol brillará por momentos y continuarán las tormentas aisladas, pues según los últimos informes meteorológicos, las lluvias causadas por la vaguada de baja presión que persiste en la zona, y que, al sur de Jamaica promete cobrar fuerzas en las próximas horas, puede convertirse en la nueva depresión tropical. En tal sentido, es importante tomar en cuenta que las fuertes y prolongadas lluvias, casi siempre vienen acompañadas de un séquito habitual: gripe, dolores de garganta, tos, estornudos, bronquitis, resfriado, laringitis, alergia, bronquitis, sinusitis y otitis.

De acuerdo a la revista Prevenir, para evitar los posibles resfriados, gripes e infecciones producidas por el frío, cada quien debe asegurar unas defensas altas que sirva de barrera, ya que el entorno se llena de bacterias y virus que atacan el organismo, provocando enfermedades.

De igual forma, la publicación española, explica que el mundo vegetal es una auténtica mina donde se pueden encontrar remedios para cada una de estas afecciones. Entonces, porqué no disfrutar de las propiedades expectorantes, calmantes, antitusígenas  y analgésicas, de plantas medicinales como el eucalipto, menta, canela, salvia, lavanda, manzanilla, cebolla, romero, entre otras, y si por demás, se puede adquirir de forma fácil y a un módico precio en mercados y tiendas especializadas en la venta de este tipo de  hierbas.

Eucalipto y menta

Los mocos, estornudos, dolores de cabeza y garganta son síntomas conocidos por todos. Con la gripe, además, hay fiebre alta y dolor de músculos o articulaciones.

La gripe es un virus que se transmite de persona a persona a través de la tos, el estornudo o tocando con las manos objetos previamente infectados. Este virus se puede controlar con infusiones de eucalipto, menta, canela, pimienta y tomillo.

El aceite esencial de eucalipto descongestiona y desinfecta.

La menta es muy aromática, descongestiona y es expectorante; evita los contagios.

La canela, pimienta, tomillo, albahaca…son plantas «de cocina» que calmarán los síntomas.

Según la revista Prevenir, para preparar vapores a base de aceite de eucalipto se deben tomar 3 tazas de agua hervida y añadir 1/4 de cucharadita de aceite de eucalipto o menta; inhalar los vapores cubriendo la cabeza con una toalla. Este se debe repetir tres veces al día.

Salvia, lavanda y manzanilla

La laringitis es una inflamación de la laringe, que puede acompañarse de otra enfermedades, como bronquitis o faringitis. Es un virus alojado en las vías respiratorias. La salvia, lavanda y manzanilla son algunas de las plantas que Prevenir recomienda para combatirlo.

Las flavonoides de la salvia actúan en la garganta, mientras que, el aceite de lavanda junto a la manzanilla se emplea para preparar friega para el asma y la bronquitis. La miel de lavanda es de agradable sabor, buen antiinflamatorio y tónico. Los especialistas desaconsejan su uso durante el embarazo.

Una decocción de dos cucharadas de flores de manzanilla en medio litro de agua y hacer gargarismos varias veces ayuda a calmar la irritación de garganta.

Llantén

Las alergias se relacionan con la primavera, pero existen las alergias de otoño, debido a las plantas que polinizan en los meses más fríos. Cuando el cuerpo rechaza ciertos elementos tiene reacciones químicas que se manifiestan con una sucesión de estornudos y congestión nasal. El llantén, de acuerdo a Prevenir, es ideal para tratar enfermedades respiratorias alérgicas. Sus iridoides alivian la tos y la infección.

 Cebolla y romero

La bronquitis es una inflamación de los bronquios. Aunque es leve y suele curarse con complementos, es muy molesta, sobre todo en personas que padecen afecciones del corazón o los pulmones. Es originada por una infección bacteriana o vírica. Para tratarla se recomienda el uso de la cebolla, la cual contiene vitamina A, B y C y minerales como el fósforo, que es deputativo. Además se recomienda preparar una infusión de romero que alivia los problemas respiratorios. Aspirar el humo de las ramas y hojas recalentadas despeja los bronquios.

Áloe vera y zanahoria

Las condiciones climatológicas del otoño contribuyen a resecar la piel, además de empeorar problemas comunes como la psoriasis o la dermatitis atópica, otitis y favorece la aparición de sabañones, que se originan por el frío y el viento de la nueva estación. Para curar estos problemas de la piel se recomienda el uso de áloe vera (sábila) que tiene acción antiinflamatoria y ablanda durezas. La zanahoria previene el envejecimiento cutáneo, trata la psoriasis, forúnculos y sabañones.

 Eucalipto

En tanto la sinusitis es una inflamación de la parte alta interior de la nariz, la sinusitis aguda, de corta duración, suele desarrollarse después de una infección de los conductos respiratorios. Puede provocarla una alergia o una infección de tipo bacteriano. Para tratarla, el eucalipto es lo mejor. Esta planta hace más líquido el moco alojado en el pulmón, lo que permite eliminarlo más fácilmente. Son conocidas en la actualidad sus propiedades antibacterianas de los bronquios y es un excelente remedio para la congestión nasal y la tos, lo que ayuda a respirar mejor y sin molestias.

 Lúpulo, avena y ginseng

Otra afección propia de la época es lo que se conoce como depresión otoñal que se caracteriza por una serie de síntomas como fatiga, somnolencia, desánimo e irritabilidad. Afecta especialmente a las mujeres que rondan los 30 años. Si aumenta, hablamos de Desorden afectivo Estacional, cuyo origen se asocia a la secreción de melatonina. El lúpulo, la avena y el ginseng se emplea para tratar esta afección.

Las flores del lúpulo tienen propiedades sedantes e hipnóticas, por lo que favorece el sueño y disminuye la sensación de ansiedad. La avena relaja la mente. Sus vitaminas y oligoelementos ejercen una acción sedante y el ginseng revitaliza el cuerpo y la mente. Su fuerza curativa está en la raíz, que debe arrancarse con cuidado.

 Tomillo

El tomillo resulta ideal para tratar las toses y estornudos. Típicamente mediterránea, es una hierba con propiedades antisépticas (previene la infección), ideal para tratar, en especial, las afecciones del pulmón. Calma la tos y disminuye el moqueo.

Las toses y estornudos son una aspiración explosiva, seca o con flema, que libera a los bronquios de sus secreciones. Beber abundante agua y evitar el tabaco ayuda a mejorarla. Éstas pueden ser causadas a consecuencia de otras enfermedades como catarros, sinusitis, rinitis…

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