Dos miembros de la Cámara de Cuentas, Juan Adalberto Lora Ruiz y José A. Maceo, renunciaron ayer ante el Senado de la República, decisión que los exime del juicio político aprobado este miércoles por la Cámara de Diputados.  Ambos defendieron su honor y dijeron que renuncian por la tranquilidad de sus respectivas familias.

Dos  de los nueve miembros de la Cámara de Cuentas renunciaron  ayer  ante el Senado, cuyo presidente, Reinaldo Pared Pérez, dijo que esa decisión los exime del juicio político iniciado por la Cámara de Diputados contra la matrícula del organismo fiscalizador de los recursos públicos.

Los renunciantes son los licenciados Juan Adalberto Lora Ruiz y José A. Maceo.

De inmediato, se dijo que la exoneración del juicio a los renunciantes provocará el “efecto dominó” o renuncia en cascada de los demás  miembros de la Cámara de Cuentas.

Pared Pérez garantizó que mediante el juicio político el Senado garantizará el derecho de defensa a los acusados por  alegadas  faltas graves en el ejercicio de sus funciones.

Tras precisar que a las 4:30 de la tarde de ayer aún no había recibido el expediente acusatorio de la Cámara de Diputados contra los miembros de la Cámara de Cuentas, Pared Pérez dijo que tan pronto reciba el documento convocará a la Comisión Coordinara del Senado para estudiarlo.

Recordó que esa comisión está conformada por el bufete directivo del hemiciclo y los voceros de los bloques políticos.

Proceso
Luego del estudio del expediente,  informó, el Senado se constituirá en Comisión General para realizar los interrogatorios a los acusados.

Expresó que esta modalidad ofrece más flexibilidad y soltura para iniciar el proceso.

Dijo que, particularmente, favorece que los interrogatorios y el juicio mismo se haga individualmente, pero señaló que esa decisión deberá tomarla el pleno senatorial.

Exonerados
Pared Pérez dijo que los miembros de la Cámara de Cuentas que renuncien a esos puestos quedarán eximidos del juicio político.

Recordó que conforme al numeral 4 del artículo 23 de la Constitución,  el Senado no podrá imponer más que la destitución a los acusados que resulten culpables.

“Si renuncian todos, no habrá juicio; si uno se queda, hay que hacerle el juicio”, subrayó.

Ministerio público
El presidente del Senado dijo que los destituidos por faltas graves podrán ser enjuiciados por la justicia ordinaria si el ministerio público incoa ese procedimiento.

Sin embargo, precisó que no corresponde a la Cámara Alta acusarlos ante la justicia ordinaria, luego de haberlos destituido.

Maceo
El licenciado José A. Maceo expresa en su carta de renuncia que tomó la decisión para tranquilidad personal y la de su familia, ya que las acusaciones  no lo afectan.

Lora Ruiz
El licenciado Lora Ruiz, también renunciante, expresa que ha visto con gran pesar cómo se ha jugado con el honor y la integridad de un hombre que el único pecado que ha cometido es actuar apegado a los más estrictos criterios éticos y morales.

Resalta que se ha echado lodo sobre su honor, más no de su honor, porque resultó demasiado difícil cuestionar su seriedad.

Por tales razones, agrega Lora Ruiz, “prefiero evitarme y evitarle a mi familia ser actor en el terrible espectáculo que se pretende dar a este país.

El renunciante resalta que está confiado en que lo juzgará la historia.

Zoom

Precedentes
1. Las actas del Senado registran como precedentes de juicio político a funcionarios públicos  el realizado  el 27 de abril de 1972 contra el entonces síndico Manuel A. Jiménez Rodríguez (Manolín), quien fue acusado de conspirar contra el gobierno del doctor Joaquín Balaguer. Fue destituido el mismo día.

2.  Otro precedente es la destitución del licenciado Rafael Estrella Ureña como presidente de la República en el año 1930.

3. También el de los diputados Miguel A. Roca y Miguel Grisanti.