El 25 de marzo del 2015, cuando ni el presidente Danilo Medina, ni Gonzalo Castillo ni yo podíamos imaginar que el ministro de Obras Públicas sería el candidato presidencial del gobernante Partido de la Liberación Dominicana (PLD), escribí en el HOY una colaboración con el título “Ese Gonzalo si sabe…” donde reseñaba su exitosa maniobra para ganar la batalla contra los poderosos sindicatos de choferes y los numerosos ciudadanos que, como yo, nos oponíamos al incremento de 233% en la tarifa de los peajes, cuando aparentó una “retirada” en su propósito y luego aprovechó sus obras viales, en especial la circunvalación que conecta la autopista Duarte con la 6 de Noviembre, para incrementarlo en un 666% y multiplicar por 4 la tarifa previa en los demás peajes.
Ya candidato, con sus infelices apariciones públicas en diferentes escenarios y frente a la prensa, dio optimismo a sus adversarios, pero El Penco ha ido aprendiendo en el camino y parece haber dado en el clavo al predecir frente a un grupo de sus seguidores que lo ocurrido con las elecciones del 16 de febrero será “resuelto en dos o tres semanas” dejando la impresión de que él ya conoce a su gente y la capacidad que tienen para apaciguar escándalos y lograr tolerancia, indiferencia o cansancio en la ciudadanía, como ha ocurrido con algunos casos como Diandino y sus “offshores”, Odebrecht y sus secuelas, los millonarios equipos que la anterior junta tiró al zafacón, los miles de millones del asfalto y la emblemática Punta Catalina, convertidos en platos de segunda y tercera mesas en el banquete socio-político nacional, lo cual Gonzalo sabe muy bien.