Se trata de un trabajo silencioso y sin protagonismos, en el que los participantes de cada institución asumen el reto y se esfuerzan para lograr un objetivo común: Convertir a la Ciudad Colonial en un atractivo para el turismo cultural y religioso, lo que optimizará esa actividad económica a través del desarrollo de servicios y productos turísticos de alto potencial competitivo.

Todos están conscientes de que la Ciudad Colonial demanda una prospectiva acompañada de ideas y recursos que canalicen una gestión en armonía con la Convención de Patrimonio Mundial.

El Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez es un entusiasta de las iniciativas que se han puesto en marcha para desarrollar la Ciudad Colonial. Actualmente preside tres instituciones fundamentales para la ciudad colonial.

La primera es el Patronato de la Ciudad Colonial, que por muchos años ha intervenido favorablemente en el desarrollo y consolidación de la estructura social del centro histórico y su designación como Patrimonio Mundial por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

También preside El Centro de Altos Estudios Humanísticos y del Idioma Español, creado desde hace muchos años con motivo de una resolución tomada en la Primera Cumbre de Jefes de Estado celebrada en Guadalajara.

El tercer organismo es el Fondo para la Protección de la Ciudad Colonial, que administra las propiedades del Estado en el gran polígono urbano de su competencia, y que anualmente lleva a cabo un programa de conservación de grandes monumentos y casas coloniales.

El que quiera conocer sobre este tema puede acercarse a las páginas del Anuario número cuatro del Centro de Altos Estudios adscrito a la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña, dedicado en buena parte a los programas ejecutados por esta institución, apunta el arquitecto Eugenio Pérez Montás, coordinador de la Unidad Ejecutora del Arzobispado.

López Rodríguez está patrocinando, conjuntamente con la Presidencia de la República, el Plan Catedral II, con motivo del quinto centenario de la erección de la Catedral. El 8 de agosto de este año se puso en circulación un libro dedicado a la Catedral, cuya presentación está endosada por el Cardenal.

Esta obra se publicó con motivo de la celebración de los 500 años de las primeras Diócesis de América: Santo Domingo y La Vega en la Española y San Juan en Puerto Rico, creadas con la Bula Romanus Pontifex, del Papa Julio II, el 8 de agosto de 1511. El Cardenal hace las siguientes observaciones:

La publicación de este libro ha sido un sueño que hemos acariciado durante mucho tiempo. Hace unos años les pedí a los integrantes del Comité Editorial del Centro de Altos Estudios Humanísticos y del Idioma Español, dependiente del Patronato de la Ciudad Colonial, trabajar en el mismo, sabiendo que no se trataba de una tarea fácil, ya que la Catedral, corazón del centro histórico, es un organismo que multiplica su protagonismo año tras año.

Su polígono de influencia es origen y destino de un circuito deslumbrante entre la Plaza Mayor y la Puerta de San Diego. Esta ruta cruza por el conjunto monumental levantado en los primeros años del siglo XVI, entre ellos las casas góticas de la calle Las Damas y los palacios de la Contratación, Cancillería Real y de los Gobernadores y Capitanes Generales, en el añejo polo creado por Fray Nicolás de Ovando.

Iniciativas

Este año se han puesto en marcha tres iniciativas fundamentales para la Ciudad Colonial. Primero, el proyecto IBEROEKA-CPA-Catedral, cuyos trámites se llevan a cabo a través del Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, encabezado por la Ministra Ligia Amada Melo de Cardona. El segundo es el proyecto BID-MITUR, cuya denominación oficial es Programa de Turismo para la Ciudad Colonial de Santo Domingo, que contempla una importante inversión de recursos en una serie de proyectos a través del Ministerio de Turismo, encabezado por el ministro Francisco Javier García, con quien se organizó un tercer proyecto denominado Centro de Interpretación para el Turismo Cultural y Religioso de la Ciudad Colonial de Santo Domingo, que se lleva a cabo conjuntamente con el Museo de la Catedral.

Antecedentes

Términos de referencia.

Los antecedentes del proceso de revitalización del centro histórico se remontan al año 1967 con el Plan ESSO Santo Domingo Colonial. Para el año 1982 se puso en marcha un estudio patrocinado por la Organización de Estados Americanos, denominado Términos de referencia para un estudio de preinversión sobre la utilización del Patrimonio Cultural de la Zona Colonial de Santo Domingo. Poco antes, en 1975, entró en vigencia la Convención del Patrimonio Mundial, ratificada diez años más tarde por la República Dominicana.

En 1991 se llevó a cabo el Plan Cuna de América, patrocinado por la OEA, formulado para la revitalización de la Ciudad Colonial de Santo Domingo con el propósito de propiciar su aprovechamiento turístico, la conservación del patrimonio cultural y reactivar el turismo y las actividades económicas.

A partir del año 1999 se ejecutó el Proyecto de Revitalización de la Ciudad Colonial de Santo Domingo (Plan Cerrillos), patrocinado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Las diligencias ante esa institución fueron iniciadas por López Rodríguez en el otoño de 1994, en la ciudad de Washington, sede de ese importante organismo de financiamiento. Para esa ocasión se realizó un viaje en compañía de Bienvenido Brito, economista al servicio del Patronato y Director Ejecutivo del Fondo para la Protección de la Ciudad Colonial de Santo Domingo.

Desde entonces, fue designado el arquitecto Eugenio Pérez Montás como coordinador nacional del estudio, teniendo por contrapartida en el BID a su homologo Eduardo Rojas. El Estudio BID-Cerrillos-España, estuvo avalado por la Secretaría Técnica de la Presidencia, el Ayuntamiento del Distrito Nacional, como gobierno local en el ámbito municipal y por la Oficina de Patrimonio Cultural.

En el 2006 se inició el Plan de Revitalización Integral de la Ciudad Colonial de Santo Domingo (Plan Lombardi), patrocinado por el BID y por el Patronato de la Ciudad Colonial, cuya presidencia ostenta el Cardenal desde hace años.