Reportaje
Crisis petrolera y alimentaria: un desafío sin precedentes

Reportaje<BR>Crisis petrolera y alimentaria: un desafío sin precedentes

De 1980 al 2007 (27 años) hubo solo dos crisis alimentarias. Sin embargo, de 2008 al 2010, en apenas tres años ha habido dos grandes crisis alimentarias. ¿Qué está ocurriendo enla estructura alimentaria mundial para que se haya presentado un cambio tan dramático en tres décadas?

1. Producción a. El aumento anual en la producción mundial de cereales de 1960 al 1990 fue de un promedio de 3.12%, mientras que hubo un aumento de la población mundial de 1.8% en promedio anual. ¿Qué ocurrió?: la implantación de la denominada “Revolución verde” en el inicio de la década de los sesenta.

b. El aumento de la producción de alimentos de 1990 al 2010 (21 años) descendió de 3.12% anual apenas a un 1.9% anual en la productividad, o sea, una reducción de 33%, mientras que la población aumentó en 1.6% por año.

2. Demanda

La demanda mundial de granos está aumentando en 38 millones de toneladas anuales.

Existencia Se ha producido un desplome en días de la existencia mundial de granos como porcentaje del consumo, conforme a las estadísticas del Departamento de Agricultura de Estados Unidos.

El porcentaje de las existencias como parte del consumo (usando un sistema de medición diferente) fue de 28.76% del 1985 al 2000. Sin embargo, del 2000 al 2010 fue tan solo de 21.56 %, lo que representa una caída drástica en apenas 11 años de casi 25.04%.

Si se reducen las grandes reservas estratégicas de grano (especialmente la de China) que sólo se usan en emergencias, entonces las existencias libremente disponibles serían apenas 14.5% del consumo mundial, según el trabajo de la FAO Crop Prospect and Food Situation, de marzo del 2011.

¿Por qué ese desplome? Porque en los últimos 11 años la producción de alimentos fue siete veces inferior al consumo.

Frente a este panorama internacional, nuestro país se enfrenta a dos fuertes crisis simultáneas:

1. La alimentaria que se caracteriza por un constante crecimiento en el consumo, inestable crecimiento en la producción mundial y niveles bajos en las existencias como proporción de la demanda mundial. La situación es crítica para nuestra nación, pero menos grave que muchos de los otros países, ya que el país es autosuficiente en arroz y frutos menores. En adición, el país tiene extraordinarias posibilidades de aumentar su producción agropecuaria si se toman una serie de drásticas medidas (que presentaremos en un próximo trabajo) las cuales podría aumentar exponencialmente nuestras producción agrícola.

2. La crisis del petróleo que se ha agravado por estos hechos:

• La crisis de Japón detuvo abruptamente el vigoroso crecimiento que llevaba la industria de la energía atómica que en el 2010 ya representaba el 10% de la energía total producida en el mundo; lo que pondría presión adicional a la demanda del petróleo.

• Las sucesivas crisis políticas en el Golfo Pérsico y el Norte de África.

• La demanda mundial de petróleo (conforme a la Agencia de Energía Mundial) creció en 2010 a pesar de los precios altos en 2.5 millones de barriles por día, y está proyectado a crecer 1.5 millones en el 2011 debido al incremento en la demanda de energía de los países emergentes como consecuencia del aumento del parque vehicular, un incremento notable en el proceso de industrialización y un desbordamiento en la urbanización. De nuevo el factor chino juega un rol preponderante en este aumento de la demanda.

• Sólo a Arabia Saudita le queda una aceptable capacidad ociosa, cerca de 4.5 millones de barriles diarios (apenas 3.3 millones de barriles diarios, actualmente, mientras Libia no esté produciendo) comparado con una demanda mundial de casi 90 millones de barriles de petróleo diarios.

La fragilidad de la estructura petrolera percibida por el mercado de futuro de Wall Street es de tal manera que el petróleo de West Texas a Mayo de 2011 está proyectado a estar en 107.66 dólares por barril, mientras que para enero de 2014 la proyección es de 102.61 dólares por barril.

• ¿Cuál es el límite en el aumento del precio del petróleo? Estimamos que aproximadamente 120 dólares el barril, puesto que este sería el precio que tendría como consecuencia la creación de una recesión mundial, y sería a la vez el precio con el cual el Presidente Obama utilizaría las Reservas Estratégicas de Lousiana de 721 millones de barriles.

En adición, China también tiene sus Reservas importantes, aunque desconocidas, también Europa pero a un nivel más modesto.

Consecuencias potenciales para el país de la simultaneidad de la crisis petrolera y alimentaria Consecuencias potenciales para el país de la simultaneidad de la crisis petrolera y alimentaria. La crisis petrolera tiene en el país un elemento interno: el apreciable aumento en nuestro parque vehicular contribuye a incrementar el consumo de petrolero. El parque vehicular, neto de motocicletas, conforme a cifras oficiales, aumentó 75.1% en los últimos 11 años. Lo notable es que mientras los vehículos de bajo cilindraje aumentaron modestamente en un 50% en 10 años, los jeeps y jipetas (que son más ineficientes en el consumo de gasolina y gasoil) aumentaron en 340% en esa década.

Así pues, la confluencia de la crisis de los precios del petróleo, metales y la agropecuaria (con su potencial de durabilidad) presenta un desafío sin precedente para el país. ¿Por qué?: porque las exportaciones del 2005 al 2010 aumentaron a apenas 453.4 millones de dólares, mientras que nuestras importaciones (evidentemente éstas crecerán mucho más en el 2011), aumentaron en 5,429 millones de dólares en el mismo período.

La potencial durabilidad de las crisis del petróleo, metales y alimentaria, aún en el evento esperado de que el precio de estos productos se redujera de una manera moderada, si no se toman las acciones necesarias, podría afectar en 24 meses o varios meses más, la posibilidad de que podamos, como hasta ahora, enfrentar adecuadamente los requisitos de nuestra deficitaria balanza de saldos corrientes con las consecuencias que esto podría producir.

Es evidente, y más aún ahora, que nos estamos aproximando al límite de nuestro endeudamiento, que hay que cambiar el modelo actual vigente, que existe desde algo más de dos décadas: concentrado en un fuerte sector de servicios, inversión extranjera, remesas, de un sector débil de producción de bienes y de un consumo (público y privado) que no guarda ni remotamente relación con nuestras posibilidades como nación.

Otro caso similar es el del sector energético, en donde la tarifa eléctrica es algo más del 50% que la de los países del DR-CAFTA, por ser este un sector oligopólico y, además, debido a la decisión de traspasar a los usuarios que pagan la energía, las pérdidas ocasionadas por aquellos que no la pagan. La ineficiencia de nuestra oferta eléctrica es tan seria que el país ocupa el lugar 132 de 139 países del mundo en la eficiencia de la oferta eléctrica; solo Nepal, Nigeria, Chad, El Líbano, Angola, Bangladesh y Timor están por encima de la República Dominicana en la deficiencia en el servicio eléctrico.

Este modelo, a través de los años, ha ido erosionando nuestra competitividad y, consecuentemente, ha evitado que podamos hacer uso del activo más valioso de la nación: el acceso libre a más de 800 millones de consumidores reales en Estados Unidos y Europa. En otras palabras, de ser competitivos, podríamos estar exportando 10 o 15 veces más lo que actualmente exportamos.

Esta situación demanda que construyamos un nuevo modelo que requiera un consumo más frugal, un mayor ahorro (gubernamental y privado) para invertir en un mejoramiento apreciable de nuestra competitividad y  de esa manera obtener un fortalecimiento dramático en nuestra producción sin descuidar los sectores de servicios, especialmente, el turismo, de inversión extranjera y de las remesas.

En lenguaje sencillo: sólo con una obsesión por la competitividad podremos construir una sociedad económica y socialmente vibrante, como ha ocurrido virtualmente en  Asia.

Competitividad

El  modeloconómico  que ha matenido el país  ha contribuido a erosionar seriamente nuestra competitividad al punto que el país ocupa el lugar 101 de 139 países según el Reporte de Competividad Mundial del 2011, publicado por el Foro Económico Mundial.De acuerdo al Reporte de Competitividad Mundial 2010-2011, la República Dominicana es una de las naciones con mayores imperfecciones de mercado, lo cual significa una alta concentración oligopólica en la política de precios (son aquellos precios que no se establecen en función de las fuerzas libres del mercado), agravando de esa manera el fuerte impacto de la inflación importada.

Un caso especifico de esta situación lo constituye el transporte de carga, donde un aumento de un 25% de los carburantes, el cual representa alrededor del 40% en la estructura de costo de este sector, 15 produce un incremento de un 30% de los precios, en vez de un 12% que sería lo esperado.

Ante los efectos de la crisis sobre la economía dominicana, sólo con una obsesión por la competitividad podremos construir una sociedad económica y socialmente vibrante, como ha ocurrido virtualmente en  Asia.

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