Lo del mercado de Villa Consuelo, construido en 1952 cuando Trujillo cumplía 22 años en el poder, es otra historia repleta de promesas incumplidas, amarguras, y de iniquidad.
La edificación que se levantó en 1992 para alojar a más de 750 comerciantes, muchos de ellos con 30 y 40 años negociando en ese sector de la capital, se ha deteriorado con el paso del tiempo, y sirve de depósito de desechos sólidos que atrae a ratas, cucarachas y otras alimañas.
El montón de casuchas donde opera el viejo mercado, estrechas, inseguras, calurosas, antihigiénicas, son una amenaza latente. La tragedia acecha, lista para dar un zarpazo en cualquier momento. Comerciantes y clientes se apiñan, se movilizan de un lado a otro, unos ofertando sus mercancías, otros comprando.
El inusual movimiento de personas en el laberinto de callejones se asemeja bastante a un cardumen de sardinas.
La gente camina de prisa, tropezando con otras personas, muchas veces sin pedir disculpas. El ruido de voces y equipos de sonido es una molestia permanente. La falta de higiene es un serio problema de salud pública en el destartalado mercado de Villa Consuelo. El apestoso y desagradable hedor que despide las aguas negras causa náuseas. Los desechos sólidos se amontonan por doquier. Es dificultoso respirar ese ambiente, caluroso y saturado. No hay espacio para depositarla de forma ordenada. La combinación de basura y aguas negras es peligrosa para la salud de quienes conviven en ese ambiente. Se han reportado numerosos casos de dengue.Desde 1992, cuando fueron desalojados los comerciantes del viejo mercado de Villa Consuelo para darle paso a una moderna y espaciosa edificación, se crearon muchas expectativas. La obra ha pasado de mano a en mano, de gestiones de síndicos que no asumieron la responsabilidad, hasta instancias gubernamentales, que tampoco asumieron su rol. La Oficina de Ingeniero Supervisores de Obras del Estado ha prometido, en reiteradas ocasiones, terminar la obra. Promesas no han faltado.
A principios de julio de 2006, los comerciantes se animaron con la promesa que hizo Salcedo Gavilán en un programa de televisión: Hemos emprendidos un proceso de saneamiento de nuestros mercados. Hoy se le está dando feliz término al mercado de Villa Consuelo Ese mercado será terminado en unos tres meses. Pasaron cuatro años y persiste el problema. El alcalde del Ayuntamiento del Distrito Nacional no se deja ver por los alrededores.
Roberto es un charlatán, un figurero. Lo digo yo, Luis Araujo, gomero con 50 años aquí en Villa Consuelo. El hombre, con el torso desnudo, toma aliento y comenta: Ese es el síndico más bultero que conozco. Yo no sé por qué la gente vota por ese señor. Estamos cansados de sus promesas La obra sigue paralizada.
Mario Félix, joven mercader, también está inconforme: El Gobierno y el síndico son unos irresponsables. Llevamos años esperando ese mercado y no lo terminan. ¡Que barbaridad¡ y tantos cuartos que se gastan en política.
La empresa española Mercantil Exportadora (EMEX) firmó un contrato con la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado para la remodelación del mercado de Villa Consuelo. Se requiere la aprobación de un préstamo de 45 millones de dólares.
Remedios caseros. En el mercado se consigue Túa-túa para curar el empache estomacal de niños; Sábila para desintoxicar el cuerpo; Maguey de Bestia para infecciones estomacales de adultos; Juana la Blanca, para aliviar el mal de orín, dolor en la vejiga y resfriados; botellas elaboradas con diez diferentes clases de raíces, recomendadas para la infertilidad femenina, para limpiar los intestinos y los riñones; amuletos para prevenir el mal de ojo a los recién nacidos y Samo para la curación de la próstata.Se puede conseguir Apasote, remedio tradicional para desparasitar a los niños; Mala Madre, para la inflamaciones vaginales; Bruca con guarapo de caña, para el pecho apretao; hojas de Mamón, para los espasmos estomacales; Cebo de Flande, aceite quemao´, Cuaba y Trementina para el Acido úrico; raíz de Anamú, para curar resfriados; Trementina y Cuaba, para las articulaciones.Otros ingredientes solicitados son la Ruda y el Agua Bendita, utilizados indistintamente para actos religiosos, de brujería, para alejar a los malos espíritus, la mala fe, la envidia y los malos pensamientos.
Críticas en redes sociales
Daniel E.
Eso del mercado de Villa Consuelo viene dando tumbos de lejos. Llegaremos al siglo XXII, pintándonos pajaritos en el aire, como Salcedo Gavilán, quien lleva dos periodos, y va para tres, y no le ha puesto un dedo a ese problema.
Rosa Esther
Qué carajo le importa a ninguna sindicatura el mercado de Villa Consuelo, si saben que en este país todavía se amarran los perros con longaniza. Hay una escuela, que por cierto se llama profesor Juan Bosch, que Roberto Salcedo debe repararla.
Sergio C
Hay que terminar ese céntrico mercado capitalino, para el bien de la población y para más higiene del área. Más higiene, significa menos mosquitos, jejenes, ratones, cucarachas y otras plagas repugnantes. ¿Estamos?…
José de la Cruz
Señor Síndico, ordene del reinicio del Mercado de Villa Consuelo. Este mercado necesita ser terminado ¡.Ah, políticos, que una vez en el poder, entregan su alma al diablo y se olvidan de los chiquitos.
Ángelo C.
Salcedo, usted tiene ocho más de ocho años y todavía no ha terminado el mercado de Villa Consuelo, ni el mercado Nuevo que prometió realizar. ¡Qué allante¡ Ganó y se olvidó de que esos mercados son una gran necesidad para la población.