La Fundación brasileña Odebrecht pertenece a un reducido círculo de ganadores del premio anual Pacem in Terris (1996), inspirado en una encíclica papal de profundo sentido social.
Se trata de un reconocimiento internacional de estímulo a las mejores causas de la humanidad en el que las entidades de origen corporativo brillan por su ausencia, a pesar de que desde hace tiempo los gigantes de capitalismo, incluyendo esta empresa de construcciones y otros renglones creada por Norberto Odebrecht, suelen destinar partes de sus beneficios a fines humanitarios.
Es mucho lo que en ese campo llevan a cabo colosos como la Fundación Bill y Melinda Gates, gracias al éxito de Microsoft; o Google.org, el brazo filantrópico de Google que utiliza la tecnología e información para trabajar por los grandes retos globales de estos tiempos.
Pero entre los frutos importantes en América Latina procedentes de entidades empresariales interesadas en compartir su éxito con las sociedades a que pertenecen están los de la Fundaçao Odebrecht, que asumió responsabilidades sociales mayores en su propio país, Brasil, y en otras partes del mundo desde 1988.
Del trabajo de esta identidad en el año 2000 se habían beneficiado 500 mil adolescentes y educadores brasileños en el marco de un programa para el Desarrollo Regional Integrado en el nordeste de Brasil, estado de Bahía, una región con algunos de los peores índices de desarrollo humano y de menor inversión social.
El trabajo se enfoca allí en lo que la Fundación describe como desarrollo del capital productivo, humano, social y ambiental. Notables objetivos en pro de los asalariados y la colectividad.
El reconocimiento Pacem in Terris Peace and Freedom nació de la encíclica «Pacem in Terris» del Papa Juan XXIII publicada en 1963. Fue creado por un Consejo Interracial cristiano de Estados Unidos. Seis ganadores del premio también fueron ganadores del premio Nobel de la Paz: Martin Luther King Jr., la Madre Teresa de Calcuta, el arzobispo Desmond Tutu, Mairead Corrigan-Maguire, Adolfo Pérez Esquivel y Lech Walesa.
Premiando, a su vez. Como organización desarrollista Odebrecht se manifiesta con objetivos que son a la vez sociales y corporativos con la creación en el año 1992 del Premio Destaque para promover la innovación, la productividad y la difusión del conocimiento. República Dominicana figura de manera destacada en la participación de proyectos en busca del reconocimiento.
El último informe anual de este incentivo al trabajo y la disciplina menciona un hito logrado en la construcción de la Autopista del Coral (vía de La Romana a Punta Cana) en cuya labor se aplicó el Sistema de Ingeniería Siseng de control de costos, en el que colaboraron las ingenieras dominicanas de 22 años de edad Natalia Cazano y Jatnna Genao.
La aplicación del sistema permitió una economía de hasta 260 mil dólares mensuales a lo largo de un intenso lapso de construcción. Estas jóvenes dominicanas de excepcionales condiciones profesionales, lograron, por ejemplo, evitar la subutilización de equipos y la selección de otros de mayor eficiencia. Un equipo pesado y lento fue sustituído, gracias a sus criterios, por motoniveladoras más baratas y ágiles.
Otro éxito local. En el marco de la construcción de la hidroeléctrica de Palomino, aquí en el país, otro grupo numeroso de dominicanos llegó a merecer el calificativo de Campeones en seguridad.
Los participantes en este proyecto se propusieron destacarse en materia de seguridad en el trabajo y medio ambiente. Cronometrados en su accionar desde abril del año 2008 hasta septiembre de 2010, el récord fue de Cero Accidentes.
El 80 por ciento de la mano de obra, formada por campesinos y agricultores de nacionalidad dominicana, había sido contratada en el municipio de Bohechío, en la cercanía de la represa. Para lograr los comportamientos seguros fue necesario un riguroso plan de capacitación y toma de conciencia sobre los riesgos. Fue notorio, en adición, el bajo índice de ausentismo que permitió mantener un grupo unido y experimentado. ¿Qué mejor forma podían utilizar los dominicanos para demostrar que asimilan con rapidez las innovaciones técnicas y que suelen llegar a las fuentes de empleos con alto sentido de responsabilidad para el cumplimiento del deber?
Así triunfó una idea. La participación ejemplar de dominicanos tuvo manifestación en otro de los aspectos de la construcción de la Autopista del Coral. En su nómina repleta de dominicanos se destacaron los ingenieros Carlos Manuel Loaces Cabral y Osvaldo Enrique Valdez, que participaron en el manejo de una logística que logró un ahorro real de más de dos millones de dólares en los costos de la vía.
¿Cómo lo lograron? Con eficiencia, productividad y optimización de recursos, utilizando los equipos y el tiempo con la máxima utilidad.
De este éxito habló Valdez recordando que la forma en que organizaron el trabajo mejoró no solo la productividad sino la seguridad en la obra, evitando accidentes.
Nuevos talentos
Para Marcelo Odebrecht, director de Ingeniería y Construcción del consorcio Odebrecht, el mayor desafío de esta firma de origen brasileño y extendida por el mundo será la captación e integración de nuevos talentos para el éxito de las diversas áreas de inversión.
Considera que la clave del consorcio ha sido la aplicación de la Tecnología Empresarial Odebrecht, respaldada por una historia de 60 años de prestación de servicios de ingeniería. El fin principal: llevarles satisfacción a los socios, clientes y destinatarios de las obras que se construyen constantemente en varias latitudes.
Odebrecht ha tenido más de 25 años de presencia fuera de Brasil y el balance a la fecha expresado por Marcelo es que más del 80 por ciento de nuestros ingresos provienen del exterior.
En relación al éxito obtenido en la República Dominicana y algunos otros países, el ejecutivo empresarial expone que: en primer lugar, hay que considerar nuestras capacitaciones internas, provenientes de la práctica de la Tecnología Empresarial Odebrecht, principalmente la delegación bien planeada que permite a nuestros empresarios socios y a los respectivos equipos actuar localmente con total alineación con las accionistas. Además, debemos reconocer, y principalmente comprender, las características de esos mercados y en muchos casos, la geopolítica brasileña, factores que nos posibilidad una actuación cualificada.
Para reafirmar el compromiso de responsabilidad social del consorcio, el alto ejecutivo se refirió a la satisfacción de contar con más de 90 empresas asociadas en todo el mundo a las que involucran en crear empleos, generar y distribuir riquezas y en desarrollar acciones sociales en las comunidades en que desarrollan proyectos.