Washington. La mayoría republicana de la Cámara de Representantes de EE.UU. aprobó ayer el proyecto de ley con el que pretende derogar y reemplazar la actual ley sanitaria del expresidente Barack Obama, después de largas semanas de negociación en la propia bancada y dos intentos fallidos para aprobar el texto.
Los conservadores, con 217 votos a favor y 212 en contra, lograron ponerse de acuerdo sobre el texto legislativo para modificar el actual sistema sanitario, que ha apoyado el presidente de EE.UU., Donald Trump, aunque aún tiene que ser aprobado por el Senado, donde la probabilidad de salir adelante es menor.
La mayoría republicana en la Cámara alta es más estrecha, y además los senadores conservadores más moderados se oponen al nuevo plan aprobado hoy por la Cámara baja, por lo que esta victoria de Trump para cumplir su promesa de acabar con «Obamacare«, como se conoce popularmente a la ley de Obama, no garantiza su éxito.
El proyecto de ley, conocido como la Ley Estadounidense de Cuidado de Salud (AHCA, en inglés), deroga disposiciones básicas del «Obamacare», incluyendo sus subsidios para ayudar a las personas a obtener cobertura, la expansión de Medicaid -un programa para las personas con bajos recursos- y las obligaciones para expandir los seguros médicos.
En su lugar, el proyecto de ley proporciona un nuevo crédito fiscal destinado a ayudar a las personas a comprar seguros, aunque proporcionaría menos ayuda que «Obamacare» a las personas de bajos ingresos.
La Oficina no partidista de Presupuesto del Congreso estimó que hasta 24 millones de estadounidenses se quedarán sin seguro durante la próxima década bajo la versión previa a la propuesta aprobada hoy, la cual no fue sometida a un nuevo análisis tras los cambios.
Los ultraconservadores del Caucus de la Libertad se negaron a aceptar esa primera versión causando en marzo pasado un estrepitoso fracaso para Trump, después de tener que posponer hasta en dos ocasiones un voto sobre la medida, ya que a su juicio no contenía suficientes cambios respecto a lo estipulado por la ley de Obama.
Entre otras cosas, los ultraconservadores han logrado retirar la obligatoriedad que bajo «Obamacare» tienen las aseguradoras de dotar seguros y no subir los costes a quienes hayan sufrido enfermedades preexistentes, un asunto tremendamente controvertido.
Se espera que el proyecto de ley de la Cámara Baja se someta a cambios importantes en el Senado, donde estará sujeto a enmiendas ilimitadas y podría ser presentado de una forma diferente a la adoptada en la Cámara Baja.
Sin embargo, Trump quiere presentar el voto de hoy como uno de sus grandes triunfos, y hasta ha invitado a los congresistas a dar su rueda de prensa posterior al voto en los jardines de la Casa Blanca.