POR NELLY RAMÍREZ
Con frecuencia escuchamos decir, «en Navidad todo el mundo bebe, inclusive los que nunca lo hacen durante todo el año». ¿Pero usted ha pensado en las consecuencias de la ingesta excesiva de alcohol?. Pues, el resultado del uso descontrolado del alcohol afecta no sólo las actividades del día siguiente, sino considerablemente el organismo, en específico, el estómago, el hígado y la memoria.

No es que usted no deba tomar algún trago social para compartir entre amigos o familiares, especialmente en esta época de Navidad, cuando los sentimientos afloran y queremos reunirnos con esa persona o familia que hace tanto no vemos.

Un trago o dos, por lo general, no producen resaca, a menos que usted sea de esas personas que no toleran el alcohol. Pero si se excede, esté seguro que, al otro día, pasará por la molestosa resaca, la cual disminuye su capacidad, tanto física como mental.

Para avalar estas consideraciones conversamos con el gastroenterólogo y endocopista de vías digestiva, Jorge R. Alburquerque Acosta, quien labora en el Centro de Diagnóstico y Medicina Avanzada y de Conferencias Médicas y Telemédicina (Cedimat).

En torno al tema Alburquerque Acosta,  lo que recomienda  es no excederse, precisamente en esta época de Navidad, cuando «hasta los que no beben lo hacen».

El facultativo, expresa que lo ideal es no pasarse de tragos pero, si ocurre, para contrarrestar las molestias que produce la resaca, debe dormirse las horas necesarias, si es posible, y, de lo contrario; tomar muchos jugos de frutas, ingerir verduras, ensaladas, caldos, frutas secas, miel, carnes y otros productos ricos en proteínas.

Así mismo explica que » la resaca se produce cuando la vitamina B1 y la capacidad enzimática que contiene el organismo disminuyen, provocando deshidratación».      

En tal sentido, el especialista recomienda no asistir al trabajo cuando se está resacado, porque  «la resaca no sólo produce efectos en el organismo, sino que afecta las relaciones sociales y responsabilidades asignadas.

«Quienes la padece, tienen la posibilidad de tener un accidente al dirigirse al trabajo, tomar una decisión inadecuada o molestar a otros con su presencia, puesto que no tienen la misma claridad mental», dice.   

Sobre las personas que con un trago alteran su conducta y se sienten mal,   Alburquerque dice que no se debe confundir este comportamiento con la resaca, ya que esto es intolerancia al alcohol.

«Estas personas, que con la ingestión de un sólo trago se desinhiben y empiezan a hacer y decir disparates es porque el alcohol les afecta el lóbulo frontal del cerebro. Esas personas no deben tomar ni una gota de alcohol», sugiere. Así mismo aclara que esto ocurre a las personas que tienen deficiencias de las enzimas que metabolizan las sustancias del alcohol.

Explica que someterse frecuentemente a una resaca produce esofaguitis, gastritis, úlceras, afecciones en el hígado y en un caso extremo la muerte de miles de neuronas en el cerebro y cáncer en el estómago.

«Cuando una persona se acostumbra a beber, y estar siempre sometido a los efectos del alcohol, cuando no lo está su comportamiento es similar, porque sus neuronas van desapareciendo y se comportan como un borracho».

Recomendaciones

  En estas fiestas navideñas el profesional recomienda primeramente beber poco.

  Tomar bebidas caras.

  No fumar mientras se ingiere alcohol.

  En el caso de violar estas recomendaciones lo aconsejable es consumir alimentos ricos en proteínas, frutas y pequeñas cantidades de café.

  Sí la persona siente dolor de cabeza el doctor recomienda tomar algún analgésico que no contenga acetaminofén».

Consejos para prevenir la resaca

La dosis recomendada para no sufrir de resaca es una cerveza o un trago. Nunca se debe tomar con el estómago vacío

La clínica define a la resaca como los síntomas que aparecen después de beber en demacía, hay un dicho que dice: Señor, si al emborracharme te he ofendido, con esta resaca te he pagado más de lo debido».

Los síntomas principales de una resaca son: dolores de cabeza, visión borrosa, dolor de estómago, náuseas, sudoración, trastornos motores, pensamientos y reflejos lentos así como bajo rendimiento en el trabajo, dificultad para manejar vehículos de motor y maquinarias industriales peligrosas.

Los malestares

Jorge R. Alburquerque Acosta señala que el etanol, sustancia con la que se elaboran las bebidas, es un tóxico, es decir, que si lo ingerimos en grandes cantidades,  produce a nivel de las meninges deshidratación y vasodilatación, lo que trae como consecuencia el molestoso dolor de cabeza.

El alcohol produce, además, inhibición de las hormonas que controlan la diuresis o pérdidas de líquidos a través de la orina y, como bloquea esas hormonas, que son las que regulan la cantidad que debemos orinar, se tiene un efecto diurético y mediante ese mecanismo nos deshidratamos, aumenta también el almacenamiento de glucosa en el hígado, lo que hace que baje la glucosa o azúcar. «El que bebe en demacía consume también muchas vitaminas B1, la suma de todas estas alteraciones que produce el alcohol es lo que trae como resultado la resaca».

Sobre los populares antídotos que se toman antes, supuestamente para prevenir la resaca, como: alimentos con altas cantidades de grasa, aceite de oliva, protectores hepáticos, complejo B y algunos análgésicos que contienen acetaminofén, afirma que nada de eso sirve, al contrario empeora la situación.

«Si una persona toma etanol que es el mismo alcohol, lo que irrita el estómago y le agrega un producto que contenga acetaminofén o aspirina, ese estómago tendrá mayor irritación».        

También hay personas que toman café y agua para la resaca, lo que es totalmente inadecuado, porque la cafeína es diurética y lo que hace es que deshidrata más ya que hace orinar más. Otros tomas más alcohol, porque creen que un clavo saca otro clavo, algo también falso.

Todas las bebidas que contienen edulcorantes, saborisantes y colorisantes, porque no se ha añejado lo suficiente producen resaca. Las bebidas destiladas dan menos resaca. Sin embargo, las bebidas de mala calidad y los tragos oscuros, como el brandy, vinos coñac y rones cuando no están debidamente añejados producen resaca. «Es por eso mi recomendación de ingerir bebidas caras, porque generalmente son destiladas varias veces, proceso a través del cual se eliminan las sustancias dañinas.

Las personas de baja estatura, especialmente las mujeres deben tomar en poca cantidad, porque toleran menos el alcohol que el hombre.

La dosis recomendada para no sufrir de resaca es una cerveza o un trago. Nunca se debe tomar con el estómago vacío.