SAN JUAN DE LA MAGUANA.- Ante un crecimiento de la agropecuaria en el primer semestre del año en 19.6% según un informe del Gobierno, el secretario Técnico de la Presidencia, Juan Temístocles Montas, esbozó ante los productores privados del país la línea maestra de lo que es el respaldo gubernamental al sector.

En una charla a mas de 200 dirigentes agropecuarios que participaron en el IX Encuentro Nacional convocado por la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), Montás manifestó que el respaldo oficial al agro se expresa en cuatro líneas de acción de políticas agropecuarias, llevadas a cabo por las autoridades del sector. Citó entre esas acciones el apoyo a la producción para consumo interno y protección del ingreso familiar rural, a las agroexportaciones, mitigación de la pobreza rural, reforma y modernización del sector agropecuario.

Resaltó que el sector oficial trabaja también en el fortalecimiento institucional agropecuario y señaló que el Gobierno otorga la más alta prioridad al proceso de transformación del marco legal e institucional del sector agropecuario, a los fines de lograr una mayor eficiencia en los recursos que el Gobierno le asigna al sector, a fin de que los servicios que le ofrece redunden en beneficio de la productividad.

Sostuvo que la reforma financiera del Estado en proceso, que incluye la modernización de la gestión de la deuda pública, traerá consigo el desarrollo mas rápido del mercado de capitales domésticos, lo cual abrirá la oportunidad para comercializar variados instrumentos financieros, sobre todo títulos de renta fija.

El funcionario dijo que a pesar de las restricciones que impone la ejecución del programa de ajuste con el Fondo Monetario Internacional, el Gobierno ha elevado sus inversiones en el sector agropecuario.

Arguyó que, para propiciar el crecimiento del sector agropecuario, las autoridades han trabajado intensamente en un programa de recuperación económica y que a consecuencia de ello entre octubre del 2004 y abril del 2006, la tasa de desocupación ampliada ha bajado de 19.7% a 16.4%. Lo que esto significa, en términos de empleos, es que durante el periodo se han creado 224,818 empleos, lo cual va en consonancia con el comportamiento exhibido por la economía.

La inflación, que es el indicador por excelencia de la estabilidad macroeconómica, se contuvo a partir de 2004 y está bajo control .

El tipo de cambio, cuya tasa de variación aumentó 66% en 2003, empezó a descender y en 2004-2005 la moneda local recuperó significativamente su valor.

El tipo de cambio descendió y se estabilizó, propiciando certidumbre para los sectores y agentes de la economía. En 2005 la tasa de cambio bajó 28% respecto del nivel promedio del año anterior. Sus movimientos en 2006 han sido armónicos y moderados.

Actualmente, el promedio de la tasa de interés activa, que es la que cobran los bancos por los créditos, está por debajo de los niveles que se tenían antes de estallar la crisis.

La reducción de las tasas de interés ha propiciado un aumento significativo del crecimiento real del financiamiento privado destinado a la producción y a otros fines.

La deuda del sector público consolidado cayó de manera drástica como porcentaje del PIB. En el primer año efectivo de la administración actual disminuyó aproximadamente 10% del PIB y se espera que para el 2008 se reduzca al 40.9%.

EN LO FISCAL

El déficit del sector público no financiero disminuyó a 0.4% del PIB, lo que significó un sobre cumplimiento de 0.4% del PIB respecto a la meta establecida. Este resultado se debió a un incremento de los ingresos fiscales equivalentes a 1.5% del PIB, debido a la reforma de 2004, así como a una fuerte reducción en los gastos del gobierno central, dijo Montás.

Acerca de la gestión del cuasifiscal, informó que el déficit cuasifiscal se redujo de 4% (2004) hasta 2.9% del PIB (2005). Esto, por la reducción de las tasas de interés: 26% (2004) a 17% (2005), por lo que se dió una reestructuración en los vencimientos de los certificados mejorando el perfil de este endeudamiento.

Puso de relieve, además, que se ha ido logrando el mejoramiento de la solvencia del sistema financiero dominicano y el cumplimiento por parte de este de las nuevas normativas orientadas a evitar la repetición de la crisis, la acumulación de reservas internacionales netas por $1,617.0 millones de dólares (mayo, 2006), lo que ha proporcionado seguridad y estabilidad del tipo de cambio.

La reducción de la percepción del riesgo-país de parte de los agentes económicos ha mejorado las condiciones para la negociación con los agentes económicos del exterior, la reforma del marco legal e institucional que facilite un ejercicio más riguroso y garantice el ejercicio de supervisión financiera, cónsono con los mejores parámetros internacionales.

ESPERANZAS

Montás planteó que si se persiste en el camino que se viene transitaando, se estima un crecimiento importante para los próximos años. La entrada en vigencia de RD-CAFTA y la flexibilidad de la economía, es una garantía de esta estimación, por lo que se estiman tasas de inflación por debajo de dos dígitos para los próximos años, asís como un déficit consolidado del sector público de 2.8% para el 2006 y alrededor de 2% en el 2007.

Se cree que la deuda del sector público consolidado llegue al 35% del PIB en el 2011, si el superávit primario del sector público consolidado se mantiene entre 2 y 2.5% del PIB entre el 2007 y el 2011, y que se requerirá una meta de presupuesto con balance cero para el Gobierno Central y déficit del sector pblico consolidado de 2.8% del PIB, equivalente a las pérdidas cuasi fiscales esperadas para este año.

También la aprobación y puesta en marcha de las reformas económicas pendientes, un programa monetario cimentado en base monetaria estable e incrementos adicionales de las reservas internacionales. La oferta monetaria ampliada crecerá en línea con el PIB, lo que permitirá un aumento del crédito al sector privado de más de un 10%, la introducción de una plataforma electrónica para las transacciones en divisas para mejorar la transparencia del mercado cambiario y reducir su volatilidad y la evaluación por la Superintendencia de Bancos de los planes de negocio de mediano plazo de las entidades bancarias.

Inicio de la supervisión consolidada.

El secretario Técnico de la Presidencia señaló empero que la economía tiene cuatro grandes desafíos y que en el futuro inmediato, Gobierno y Sociedad habrán de afrontar desafíos como el incesante aumento de los precios del petróleo y la caída de los ingresos tributarios, el manejo de la política fiscal ante el alto costo del servicio de la deuda pública y la crisis del sector eléctrico, la capitalización del Banco Central y el manejo de su deuda y la necesidad apremiante de proteger y aumentar el gasto social.

COMPROMISO

Sobre la construcción y preservación de un clima favorable a la inversión, el Gobierno está comprometido con una gestión de política económica que preserve la estabilidad y el crecimiento sostenido, mediante un manejo cuidadoso de los equilibrios fundamentales de la economía, tanto en el orden fiscal como monetario. Este clima fortalecerá capacidades y favorecerá la inversión y la competitividad en el sector agropecuario.

Y la baja en las tasas de interés, porque en la medida en que se mantenga la estabilidad de precios y se reduzca aún más la inflación, seguirán bajando las tasas de interés. Un elemento medular para conseguir este objetivo es resolver el «stock» de deuda del Banco Central.