POR CLAUDIO CABRERA
Aunque el país se encamina hacia un indetenible proceso de globalización económica que implica la apertura de nuevos mercados para nuestros productos tradicionales y no tradicionaes de exportación, así como para la realización de una variada gama de nuevos negocios, la verdad es que el mercado interno se ha impreso de una nueva dinámica que ha permitido registrar un crecimiento notorio del 11.7% entre enero y junio del 2006.

Pero se trata de cifras que cabalgan a lomo de dos sectores importantes en la economía, como son la agropecuaria y de la construcción.

Se trata de áreas con una reconocida trayectoria por su capacidad para generar nuevos empleos en el sector rural y en las principales ciudades del país, lo cual ha quedado en forma patente plasmado por las cifras del Banco Central dadas a conocer hace poco por el gobernador de la institución monetaria, licenciado Héctor Valdez Albizu.

El fenómeno se explica en función del apuntalamiento económico retomado por la economía dominicana desde el tercer trimestre del año 2005 hasta la fecha, “dado que el crecimiento económico promedio durante estos cuatro trimestres se sitúan también, en términos reales, en dos dígitos, en 11.9%”.

La dinámica expresada por los resultados registrados por la institución monetaria son buenos indicadores de la recuperación de la crisis que afectó las distintas actividades tras la crisis del 2003-2004, lo cual ha conllevado el reconocimiento por parte del Fondo Monetario Internacional (FMI), del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

“Todo esto se ha obtenido mediante la coordinación y apoyo otorgado por el presidente Leonel Fernández y los integrantes del equipo económico gubernamental y a pesar de estar el país bajo un acuerdo con el FMI, lo cual nos ha ayudado a corregir muchas de las distorsiones que hemos encarado”, afirmó el funcionario.

Acorde a los resultados, el funcionario de la institución monetaria reveló que entre las actividades económicas de mayor crecimiento relativo está el sector agropecuario, “con un crecimiento destacado de 19.6%”.

Tal importancia específica de la agropecuaria se destaca sobre todo por el hecho del gran peso específico que para la economía tiene debido a que constituye el principal proveedor tradicional de alimentos tanto para el área rural como para la ciudad. En esa misma medida, el sector agropecuario contribuye a través de su dinámica a la incorporación de mano de obra disponible para las labores agrícolas, con el consecuente aumento del empleo productivo directo.

“El sector agropecuario -sostuvo el gobernador-, estuvo influído en gran medida por el comportamiento de la producción de arroz, renglón que pesa bastante dentro del contexto de esta área, y que creció 68.3%, por los cultivos tradicionales de exportación con un 33%, así como por otros cultivos que registraron un 36.5%, por la ganadería, silvicultura y pesca, que añadieron otro 4.8%”.

Ponderando los factores que catalizaron este crecimiento en un sector que apenas hace dos años decayó en forma considerable tras la crisis económica que vivió el país y que estremeció al resto de los sectores de nuestra economía, Valdez Albizu agrega que “en el comportamiento del sector agropecuario ha sido determinante el apoyo ofecido a los productores agrícolas y ganaderos por el gobierno a través de la Seretaría de Agricultura y del Banco Agrícola, “este último el cual desembolsó a los productores de las diferentes regiones del país en el primer semestre de este año un monto de RD$2 mil 438.9 millones, lo que significa una expansión del financiamiento del Banco Agrícola de 18.76%”.

Resalta dentro de este marco también el hecho de que la Secretaría de Agricultura facilita a los agricultores que en el contexto del Programa de Alimentos Básicos (Proaba) la Secretaría de Agricultura facilita a los productores la preparación de tierras, cimientes, asistencia técnica permanente de apoyo logístico. Además la ayuda necesaria para la instauración de huertos familiares, escolares e institucionales en todo el país para la producción de hortalizas.

“Es decir, que todos los productos agrícolas, durante el período analizado resgistraron un notable crecimiento durante el presente año. Eso explica que el valor agregado, no el crecimiento del sector, fuera de un 32.0%”.

Los indicadores más notorios de estas afirmaciones confirman que el arroz en cáscara 69.2%, mientras la caña de azúcar 3.1%, café en cerezos 17.8% y otros, lo cual indica el robusto comportamento de este sector al semestre enero-junio del año 2006.

Estandarte de crecimiento
Para el gobernador, entre todos los sectores, la construcción fue el “estandarte del crecimiento”, con un elevado aumento cifrado en un 32.6%, por encima de los resultados negativos que se registraron el primer semestre del 2005 que entonces se situó negativamente en -1.5%.

Proveedor también de puestos de trabajos adicionales como la agricultura, el sector construcción fue responsable de imprimir una fuerte dinámica reproductiva, ya que sus efectos se propagan de inmediato sobre el resto de la economía.

En este orden, repercute en el sistema financiero en vista de que normalmente son canalizados fondos para desarrollarlas y cuyos intermediarios, la banca múltiple, la de desarrollo y las asociaciones de ahorros y préstamos, especializan carteras importantes de préstamos para esas actividades.

“Cabe destacar las mayores facilidades crediticias en los programas de construcción a desarrollar por los intermediarios -explica el gobernador Valdez Albizu-, los cuales tuvieron un crecimiento de un 96.1% (para la banca múltiple y de desarrollo), en tanto las entidades mutualistas facilitaron financiamiento por un 10.9% del crédito facilitado al sector construcción”.

Pero junto a los gastos en el sector privado, el gasto en construcciones representadas por el sector público fueron igualmente bastante elevados. Por eso constituyeron un factor predominante con un crecimiento del 66.8%, el cual combinado con el financiamiento destinado por la banca múltiple determinó el comportamiento registrado al primer semestre enero-junio de este año.

“Esta situación fue la que determinó que la construcción se constituyera en el sector más dinámico del semestre en la economía dominicana, en lo cual influyó la reducción sustancial de las tasas de interés para los préstamos a la actividad constructora”.

En el informe correspondiente al primer semestre de la economía se indica que como resultado de este impulso al sector, “los principales insumos de la construcción, cemento y varilla, registraron en este período crecimientos del 32.5% y del 37.8%, respectivamente”. La inversión pública destinada a la construcción registró un aumento relativo del 66.8%, pero igualmente influyó la inversión extranjera directa que alcanzó a un monto de US$418.9 millones, y cuyo crecimiento fue de 5.1%.