Resaltan crecimiento empresas
turísticas españolas en RD

<p>Resaltan crecimiento empresas<br/>turísticas españolas en RD</p>

POR QUITERIO CEDEÑO
MADRID
.- La dominante y creciente presencia de empresas españolas en el sector turismo de la República Dominicana ha incrementado la importancia de la anual Feria Internacional de Turismo (FITUR) que concluyó el pasado domingo en esta ciudad.

Las empresas líderes del turismo en España,  algunas de las cuales se incluyen entre las grandes corporaciones del mundo en este sector, ocupan también los primeros lugares en la hotelería en República Dominicana y el Caribe, incluyendo a Cancún y la Riviera Maya en México, el destino más «caliente» del Caribe y principal competencia para los dominicanos. 

La expansión de la inversión española en el turismo dominicano, ha provocado una progresiva reducción de la participación de empresas hoteleras en el stand dominicano en FITUR, pero al mismo tiempo crece la presencia dominicana en el sala 8 de la feria donde están las grandes corporaciones hoteleras ibéricas.

En la recién concluida edición de la feria sólo participaron como parte del stand oficial dominicano 6 empresas hoteleras, incluyendo las cadenas AMHSA Marina, HODELPA y Viva Resorts, que son tres de las escasas hoteleras con participación destacada de capital dominicano que aún permanecen en el sector, sobreviviendo a las desacertadas políticas o a la ausencia de políticas estatales, o a los cambios en la industria turística mundial, factores que han convertido la inversión local en una especie en extinción en la hotelería.

En FITUR se registra continuamente un interesante contraste entre la tímida y austera imagen que proyecta el pequeño stand oficial dominicano, con la riqueza de recursos y el impactante despliegue de la imagen dominicana que exhiben algunas de las  grandes cadenas que suelen desplegar imágenes gigantes de sus propiedades en primera línea de playa en las diferentes regiones turísticas del país.

Las corporaciones españolas no tienen presencia en el exhibidor dominicano ya que lo usual es realizar la proyección y mercadeo de sus propiedades en el país como parte de su estrategia global, y apoyarse en sus imponentes exhibidores que están entre los más resaltantes de la feria y disponen de espacios que a veces pueden ser hasta 10 veces mayores que el que ocupa la representación oficial dominicana, y en el cual sería cuesta arriba alcanzar sus objetivos mercadológicos, y sustentar una imagen que requiera un marco de fortaleza y gran impacto.

Además, el stand dominicano generalmente  suele proyectar hasta una imagen con menos brillo y fuerza que naciones como Chile, Colombia, Puerto Rico y otras en las que el turismo no tiene el lugar preponderante que ha ganado este sector en la dominicana.

Las cadenas españolas tenían al cierre del 2005 unas 28,500 habitaciones en República Dominicana, 30 mil en México y 15,500 en Cuba, unas 75 mil, lo que indica que son la fuerza dominante en el Caribe.

Para tener una idea de las dimensiones que alcanzan los socios españoles del turismo dominicano, es interesante considerar la posición que ostentan -según el ranking de la respetable revista norteamericana Hotels- algunos de ellos entre las primeras 100 cadenas hoteleras  mundiales. Sol Meliá ocupa la posición 12 con 81 mil habitaciones, Riu Hotels la 28 con 35 mil habitaciones, Barceló Hotels & Resorts la número 30, Iberostar Hotels & Resorts la 32, Occidetal Hotels la 46 y Fiesta Hotels la 64. Es decir que tienen seis de los primeros cien puestos, y tres de los primeros 30. Otras muchas empresas de Espana aparecen en la lista de las primeras 300 corporaciones hoteleras del mundo.

En el 2005, Sol Meliá facturó 1,165 millones de euros, que a la cotización de hoy superan los 51 mil millones de pesos dominicanos, suma que significa alrededor del 25% de los ingreso internos estimados en el presupuesto general de la nación para el 2006. Riu Hotels facturó, según el ranking de la prestigiosa revista española Hoteltur, 1,000 millones de euros, Barceló Hotels & Resorts  820 millones, Iberostar Hotels & Resorts 650 millones, Occidental Hotels 281 millones y H10 260 millones. Esto quiere decir que con el crecimiento reportado, en el 2006 la facturación conjunta de estas corporaciones iguala y hasta podría superar, los ingresos internos proyectados para el 2007 por el gobierno dominicano.

La capacidad de inversión de estas empresas es tal, que copan los primeros lugares de la lista (2005) de las cadenas  hoteleras ibéricas con mayor presencia internacional. Sol Melía ocupa el primer lugar con 44 mil habitaciones  fuera de España (157 hoteles en el exterior), Riu el tercero con 22 mil (63 hot.), Barceló 20 mil (73 hot.), Iberostar 17,000 (52 hot), Occidental 12 mil (45 hot.),  Bahía Príncipe Club & Resorts 4,757 (6 hot.) y Fiesta 4,757 (11 hot.).

Es feroz, la batalla en América Latina y principalmente en el Caribe, por atraer las inversiones españolas. La dura competencia lanzada primero por México y ahora por Jamaica  y el Caribe Inglés, ha reducido el ritmo de crecimiento en República Dominicana. Considerando que estos capitales han sido el principal factor de dinamismo para la inversión en el sector turismo en los últimos 15, es incomprensible el pobre manejo de las autoridades que conocen en detalles cómo y por qué se escapan proyectos turísticos que que originalmente se pensaron para Dominicana o que pudieron ser atraídos. Cuando México lanzó la Rivera Maya, ya Punta Cana tenía 8 mil habitaciones disponibles (1995). En los 10 anos siguientes, esta región turística alcanzó y superó el inventario de la oferta de Punta Cana. En el 2005, ya la Riviera Maya recibió tantos turístas como toda la República Dominicana con el doble de habitaciones. Este vertiginoso crecimiento se produjo fundamentalmente por el respaldo de las cadenas hoteleras ibéricas.

Quizás por las fricciones del pasado y el presente, entre los principales protagonistas de la inversión española y los responsables de la actividad turística por parte del Gobierno, el presidente Leonel Fernández se ha ocupado personalmente de las relaciones con los españoles y ha producido seis encuentros, pero se mantiene la queja de que es poco lo que se avanza.

Los viejos disgustos han sido alimentados en los últimos meses porque no ha encontrado respuesta el reclamo de los hoteleros del Este, que son principalmente espanoles, por el hecho de que el aeropuerto de Punta Cana produce más del 50% de los ingresos que alimentan el fondo para inversiones en infraestructuras turísticas, pero no llega al 5% el total de los recursos que se canalizan para atender las necesidades de la zona, al punto de que la vital avenida turística que esta en construcción, sigue en marcha gracias a los millonarios aportes que están haciendo de los hoteleros de la región al Gobierno como avances a cargo de futuros impuestos.

En  FITUR 2007, se descorrieron las cortinas de este escenario. El martes 30 de enero, día previo a la apertura de la feria, el Hotel Melia Fénix fue testigo de tres reuniones en las que fueron protagonistas principales los representantes de las empresas hoteleras espanolas presentes en Republica Dominicana, incluyendo algunos de las cabezas de las corporaciones más poderosas, entre ellos Gabriel Escarrer (Sol Melia), Abel Matutes (Fiesta), Carmen Riu (Riu), Simón Barceló (Barceló) y Miguel Fluxa (Iberostar).

La primera, un almuerzo con el Secretario de Turismo, Felucho Jiménez; la segunda, una reunión de ASONAHORES y la tercera una reunión de  la Asociación de Hoteles del Este, presidida por Ernesto Veloz y en la cual también estuvo presente Frank Rainieri, pasado presidente de ASONAHORES y uno de los principales actores empresariales de Punta Cana, principal enclave de la inversión española en la RD. Rainieri también fue invitado al almuerzo del Secretario de Turismo, aunque fue excluido el Presidente de la Asociación de Hoteles del Este y vicepresidente de ASONAHORES, Ernesto Veloz.

Uno de los españoles, que también asistió a la reunión celebrada por los principales inversionistas turísticos ibéricos con el presidente de México, Felipe Calderon y el Sr. Elizondo, su ministro de Turismo, celebrada ese mismo día en esta capital, comparó ambos encuentros y dijo que mientras la «reunión dominicana concluyó sin nada concreto», la que llamó «reunión mexicana» terminó con un entendimiento que de inmediato permitió anunciar y ratificar la decisión de los empresarios españoles de invertir en los próximos meses US$850 adicionales como respuesta al compromiso del mandatario mexicano de mantener la estabilidad en las políticas turísticas del Gobierno, lo que incluye la permanencia de Elizondo en el cargo que ocupa desde la pasada administración y quien fue reiteradamente elogiado por los empresarios presentes.

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