POR ANSELMO SILVERIO
SANTIAGO.- La Secretaria de Educación, la entidad Educa y el Ministerio Evangélico Tiempo Decisivo rescataron ayer a 225 niños y niñas de varios barrios de la zona Noroeste de esta ciudad que desertaron de la escuela para dedicarse a buscar alimentos, materiales y desechos sólidos en el vertedero municipal de Rafey.

Los menores fueron alojados en el local de la organización cristiana que dirige el pastor Pablo Ureña en la comunidad de Las Moscas de Cienfuegos.

La Secretaría de Educación se comprometió a construir un plantel escolar y un orfanato, donar los útiles escolares, los uniformes y el desayuno escolar a los niños.

Ureña dijo que la garantía que la organización cristiana tiene para que los menores no retornen al basurero dependerá del respaldo que la Secretaría de Educación y otras instituciones puedan aportar a este programa.

En este caso, nosotros creemos que nos están dando un apoyo inicial para que esos niños no vuelvan a las calles, no vuelvan a buscar comidas para alimentarse del basurero municipal, añadió.

Dijo que una de las razones por las que estos niños iban al vertedero y rehusaban acudir a las escuelas, era para desayunarse con los desperdicios en descomposición que llegan en los camiones de basuras.

El pastor evangélico precisó que muchos de estos niños se quemaban con el fuego de la basura, eran atropellados por los camiones y se intoxicaban con los desperdicios.

Nosotros esperamos que sigan dándonos el apoyo para que estos niños no vuelvan al vertedero, para que estos niños puedan recibir clases y tener paz y no sigan adquiriendo prácticas y conocimientos sobre el delito, sobre la violencia, sobre los vicios y el robo, dijo Ureña.

En el acto, además de Ureña estaban presentes los funcionarios de Educación, Iluminada Rodríguez y Hernán Vélez, coordinador de Educa.