Turquía, (AP).- Dos profesores y un estudiante universitario fueron rescatados el miércoles de edificios en ruinas en el este de Turquía, tres días después del devastador terremoto, pero los equipos que buscan sobrevivientes dijeron que las esperanzas de encontrar a alguien con vida se desvanecen rápidamente.
La cadena de televisión NTV dijo que la profesora Seniye Erdem, de 25 años de edad, fue sacada de entre los escombros a la misma hora que otros trabajadores rescataban a otro maestro.
La mujer tenía sed y preguntó por su marido, pero supo que había muerto. Horas antes, los socorristas anunciaron que habían rescatado a un universitario de 18 años más de 60 horas después del sismo devastador. Los rescatistas utilizaron diminutas cámaras colocadas en palos para localizar a Eyup Erdem y rompieron en aplausos cuando el joven salió 61 horas después del terremoto de los escombros de un edificio de varios pisos en la ciudad de Ercis, que fue la más goleada por el sismo de magnitud 7,2 que azotó el domingo.
La agencia estatal Anatolia informó que Erdem estaba ileso y siendo atendido en un hospital en el sito. El estudiante se había mudado a Ercis hace un mes para estudiar mecánica en la universidad. Equipos con equipo pesado de excavación comenzaron a retirar los escombros de algunos edificios derrumbados en Ercis después que funcionarios determinaron que no hubo sobrevivientes.
El terremoto de magnitud 7,2 del domingo ha dejado por lo menos 461 muertos e más de 1.350 heridos. Anatolia informó por separado que Gozde Bahar, una maestra de inglés, fue rescatada sólo con heridas de un edificio 67 horas después del sismo. La agencia agregó que su corazón dejó de latir cuando estaba siendo atendida por los médicos, pero que estos pudieron revivirla. Un funcionario del ministerio de Salud, Seraceddin Com, dijo que 40 personas fueron sacadas con vida de los escombros el martes.
Uno de los rescatados el martes, a 48 horas del sismo, fue una bebé de dos semanas de nacida que estaba en los escombros de un edificio de departamentos. Su madre y abuela también fueron salvadas, pero su padre seguía desaparecido. Por otra parte, las autoridades de salud dijeron el miércoles que han detectado un incremento en los casos de diarrea, en especial entre los niños y pidió a los supervivientes beber agua embotellada hasta que las autoridades puedan determinar si el agua del grifo podría estar contaminada.
El primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, afirmó el miércoles que la construcción de baja calidad contribuyó al elevado número de víctimas sepultadas en medio de numerosas edificaciones que se desplomaron a causa del terremoto. El gobernante dijo que Turquía no ha recibido noticias en otros sismos sobre tantos edificios destruidos. Comparó la acción de los constructores irresponsables con homicidio. El «concreto prácticamente se convirtió en arena» destacó el primer ministro refiriéndose a la destrucción provocada por el terremoto.