Por Hainan Reynoso Uribe
Miguel Vargas Maldonado dijo que la política exterior del Gobierno dominicano en lo relativo al tema haitiano es “incoherente, errática y desacertada”, mientras que Roberto Rosario, de la Fuerza del Pueblo, consideró que el mayor error radica en el “auto embargo que ha impuesto a los productores nacionales”.
Ambos líderes hablaron desde su rol de miembros de la alianza opositora Rescate RD.
El presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) dijo que el conflicto fue provocado por las autoridades dominicanas al generar un presunto acuerdo el 27 de mayo de 2021, donde asegura, el país sí autoriza la construcción del canal para el desvío de las aguas del río Masacre hacia territorio haitiano.
En la sobremesa del almuerzo semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio, Vargas cuestionó la “actitud beligerante” del Gobierno dominicano y observó que la confrontación dificulta cualquier solución por la vía del diálogo, “que es lo que debe prevalecer, sobre todo cuando hay acuerdos bilaterales desde 1929”.
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Recordó que, durante la convocatoria del Palacio Nacional al bloque opositor, le propuso eliminar de la agenda del Gobierno la confrontación, mantener el diálogo aunque los haitianos se rehusaran, convocar a la comunidad internacional para la solución del conflicto y presentar como Estado, “una propuesta amplia, abarcadora y viable para la solución del tema haitiano”.
Dijo que el cierre de la frontera perjudica al país, pues se trata del principal socio comercial en términos de balance, “afectamos a nuestros comerciantes, sobre todo esos comerciantes medios que generan negocios en la frontera”.
Estima que las autoridades nacionales precisan presentar, “una propuesta amplia, viable y abarcadora”, y promover la conformación de un bloque regional para desarticular las bandas criminales haitianas, buscar el retorno a la institucionalidad y convocar a elecciones democráticas.
Aunque favoreció la construcción de la verja perimetral fronteriza, criticó la incapacidad del Gobierno del presidente Abinader para ese ejercicio.
Reiteró su propuesta de una franja especial de desarrollo a lo largo de los 395 kilómetros de la línea fronteriza para que cinco millas desde la frontera hacia Haití y 5 millas desde la frontera hacia República Dominicana se genere un desarrollo de industrias y empresas, proyecto en el cual, según indica, ya muchos países se interesaron.
“Nosotros deberíamos estar procurando una solución inmediata y no procurando confrontaciones”.
Mientras que Roberto Rosario, coordinador general de la Comisión de alianzas de la Fuerza del Pueblo (FP) dijo que a pesar del cierre de la frontera continúan penetrando personas sin el aval documental para ingresar a territorio dominicano, lo que se verifica, según observa, en que las plazas hospitalarias siguen llenas y se aprecia mayor presencia de indocumentados que antes de la medida
Sostuvo que el comercio binacional es de US$1,500,000,000 anuales y que el país coloca en el mercado haitiano más del 90% de sus productos. Advirtió que los productores haitianos estarían buscando nuevos proveedores, por lo que se le estaría produciendo un daño permanente al sector productivo local.