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NUEVA YORK, AFP).- Wall Street celebraba el viernes la baja de una de las tasas de la Reserva Federal estadounidense (Fed), una medida que debería dar un poco de aire a los mercados, según las analistas, que consideran sin embargo que la crisis del crédito está lejos de su fin.
Una hora antes de la apertura de la Bolsa de Nueva York, la Reserva Federal bajó sorpresivamente su tasa de descuento en medio punto porcentual, a 5,75%.
No se trata de la tasa principal o «Fed Funds», que es aquella por la cual los bancos se prestan entre ellos, y que está fijada en 5,25%. La tasa de descuento es la tasa de interés por la cual la Fed otorga préstamos de fondeo diario a las instituciones financieras.
Esta medida, que según la Reserva Federal apunta a «favorecer el restablecimiento de condiciones ordenadas en los mercados financieros», fue acogida con entusiasmo en Wall Street.
En efecto, la Bolsa de Nueva York abrió en fuerte alza, antes de desacelerar su evolución por la mañana. Hacia las 16H10 GMT, el índice Dow Jones subía 0,94% mientras que el Nasdaq avanzaba 1,24% y el Standard and Poor’s 500, +1,29%.
«El mercado fue tomado por sorpresa», explica Peter Cardillo, analista de Avalon Partners, quien añadió: «Esto debería restaurar la confianza y liberar la liquidez». Sin embargo, los analistas se mantenían muy prudentes en cuanto a la capacidad de esta intervención de contener la crisis financiera.
«La acción de la Fed es importante, aunque en buena medida simbólica», estimaba Michael Malone, analista de Cowen & Co.
«Es un paso en la dirección correcta. Esto indica que la Fed tiene conciencia de lo que ocurre en los mercados financieros y está lista a inyectar liquidez en caso de necesidad», añadió.
«Es probable que la Fed tenga que ser más agresiva de lo que ha sido hasta ahora», advirtió no obstante Malone.
En total, la Fed inyectó 94.000 millones de dólares en el sistema monetario desde el 9 de agosto, fecha en que comenzó sus intervenciones.
El mercado podría haber caído aún más, estimaba por su parte Marc Pado, de Cantor Fitzgerald.
«Hay muchos desgastes, pero yo creo verdaderamente que la mayor parte del movimiento de baja ya se cumplió», opinó.
El jueves, el Dow Jones se había derrumbado hasta los 12.517,94 puntos durante la sesión, lo que constituía un retroceso del 10,7% con respecto a sus máximos de julio. Un retroceso de más del 10% en un período breve constituye en términos bursátiles una «corrección».
Los mercados financieros se vieron fuertemente sacudidos durante las últimas semanas la crisis de los préstamos hipotecarios de riesgo, llamados «subprime», y la dificultad de ponerle coto. Los inversionistas habían reducido fuertemente su endeudamiento y su exposición al riesgo.
«El nivel del miedo de los mercados llegó al máximo, pero los fundamentos económicos del sector de préstamos hipotecarios de riesgo («subprime») van a necesitar varios meses para mejorar», estimó Frederic Dickson, analista en D.A. Davidson & Co.
