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General Electric ha anunciado la venta de su filial de préstamos hipotecarios WMC al considerar deficitario este negocio, un mercado con clientes de alto riesgo
UEVA YORK | FAIRFIELD (EEUU).- La crisis hipotecaria estadounidense cobra cada vez más un cariz sombrío. El conglomerado estadounidense General Electric ha anunciado la venta de su filial de préstamos hipotecarios WMC al considerar deficitario este negocio, un mercado con clientes de alto riesgo que en los últimos tiempos exhibe una creciente tasa de incumplimiento.
El presidente del gigante industrial, Jeff Immelt , anunció que el grupo «ha tomado la decisión de abandonar esta actividad y reducir sustancialmente su exposición mediante la venta de 3.700 millones de dólares (2.680 millones de euros) en créditos de WMC».
La morosidad en el mercado hipotecario ‘subprime’ de EEUU, un sector en que GE irrumpió hace tres años, ha experimentado un enorme crecimiento durante el presente año, provocando que más de una cincuentena de firmas del sector se hayan visto obligadas a cesar su actividad. A pesar de que WMC despidió en 2006 a más de 1.200 empleados, la empresa no experimentó ninguna mejoría. En el primer trimestre, la firma anunció que había realizado 3.400 millones de dólares (2.463 millones de euros) en nuevos préstamos, una cifra muy inferior a los 9.000 millones de dólares (6.520 millones de euros) del trimestre anterior.
Otra ‘estocada’ a WMC la recibió esta semana desde la agencia de calificación crediticia Moody’s Investors Service, que rebajó sus ‘ratings’ sobre 399 bonos respaldados por hipotecas subprime, entre los que se incluían algunos emitidos por la compañía. La diversidad de negocios de General Electric ha sido la clave para que el gigante industrial aumentase sus beneficios en el segundo trimestre del año en un 9,6% más respecto al mismo periodo de 2006, hasta ganar 5.420 millones de dólares (3.934 millones de euros).
