El 2016 se nos presenta como un año lleno de grandes retos para toda la humanidad. En estas notas hemos querido analizar las inquietudes mostradas en varios medios locales e internacionales y amigos que han comentado el tema de las perspectivas para el mundo en el periodo que se inicio el pasado 1 de enero.
Las empresas se enfrentarán con mayor fuerza a cambios tecnológicos inminentes en la robótica, nuevos materiales e innovaciones en la producción. Para mantenerse al día buscarán adaptarse a esta nueva revolución industrial adaptando o modificando sus sistemas y educando a su fuerza laboral, lo que también están implementando los gobiernos pero a un ritmo inferior a la dinámica meteórica de la innovación tecnológica.
El mundo del marketing creará nuevas organizaciones capaces de transferir con mayor efectividad los mensajes de motivación a consumidores expertos en el uso de herramientas que compran, venden y transfieren productos y servicios con simples teclados desde la calle, oficinas, hogar o centros de diversión. La globalización hace tiempo arropó a las personas sean o no expertas en el manejo de las nuevas herramientas y las empresas marchan a pasos agigantados para penetrar cada vez con más en la plaza global creada por la tecnología. La homogeneización es una realidad.
Las marcas son mundiales y los productos debajo de sus paraguas se fabrican en cualquier lugar del mundo. De hecho hasta las comidas locales se globalizan. Te puedes comer un buen “mangú” dominicano en Barcelona, España o en New York, Estados Unidos.
Nuevos segmentos seguirán su marcha ascendente resultado de familias formadas por personas de un mismo sexo, padres y madres solteras, matrimonios entre personas de distintas nacionalidades, colores y religiones, pero se mantendrán los matrimonios y uniones tradicionales de hombres y mujeres.
Con una desigualdad económica en el mundo y las perspectivas de trabajo mermadas por las nuevas tecnologías y, la lentitud de adaptación por insuficientes planes de educación para los segmentos jóvenes que ingresan a la fuerza de trabajo, el panorama de inclusión económica para los distintos segmentos de la población se ve amenazado en muchos países del mundo, sobretodo en los más poblados. Este esquema se complica con la llegada masiva de inmigrantes de las zonas en conflicto a países de alto nivel de desarrollo tecnológico. Estas oleadas de inmigrantes presionan por más fuentes de trabajo, salud, vivienda y educación. Estas inmigraciones complicarán las sociedades que los adoptan al traer consigo costumbres diferentes y la gran parte de la veces estableciendo getos potencialmente explosivos.
En estos próximos meses el cambio climático se mantendrá afectando al planeta con temperaturas récords y crecimiento del nivel del mar exponiendo personas y haciendas a inundaciones constantes. Las recientes altas temperaturas en meses generalmente más frescos son una muestra de este cambio. Mientras tanto, el proceso de solución del problema tomará tiempo en los países con gobiernos débiles, sin instituciones y con poblaciones poco educadas cuyas calles, ríos y mares se inundan de desperdicios o cuyas industrias les tomará tiempo adaptarse a las exigencias del acuerdo internacional firmado a finales del 2015 por todos los países del mundo.

Para países con instituciones débiles o poblaciones cuyos valores son castigados por la ignorancia y falta de educación doméstica y académica, el reto es aún mayor y el proceso de adaptación requiere de acuerdos locales inminentes entre líderes políticos y sociales con concepto de largo plazo, ante lo cual cruzamos los dedos con alguna dosis de optimismo pero con dudas difíciles de controlar.

De todos modos, el mundo se enfrenta a retos inmensos que también presentan una brillante oportunidad de crear un planeta más humano y digno para todos sus pobladores. Todo dependerá de la gobernabilidad y la aplicación de medidas con la consistencia que requiere este mundo cambiante que se transporta sobre las ruedas de un desarrollo tecnológico imparable y serios conflictos religiosos y sociales.

¿Estamos preparados en nuestro país para enfrentar este reto y salir airosos?