En diciembre del 2003, el señor Roger Noriega, sub-secretario de Estado norteamericano para Asuntos del Hemisferio Occidental, visitó nuestro país. El objetivo de esta visita era la promoción del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional FMI.
La preocupación por la estabilidad económica de la nación fue explicada por Noriega en virtud de los nexos que unen a los Estados Unidos y la República Dominicana en materia de comercio, de inversiones y hasta por las corrientes migratorias. En su aparición ante el Congreso Nacional, este no pudo ser más claro en sus formulaciones «corresponde al Estado Ejecutivo y Congreso, en consulta con los diversos elementos sociales adoptar las medidas correspondientes para sanear la economía y corregir los desequilibrios».
Las apreciaciones del señor Noriega no son nuevas. En algunos foros internacionales se considera a la economía dominicana como dual. Se entiende que esta dualidad no se limita únicamente al contexto económico y a sus actores directos y que esta se manifiesta en diversas maneras y se extiende hasta aquellos que en forma consciente o inconsciente la promueven.
En los últimos 50 años, la República Dominicana pasó de una dictadura a una democracia. Muchos hábitos de nuestros políticos han pasado de generación en generación. Muchas cosas son aceptadas por una importante parte de la población como válidas, como normales. Con la injusticia por doquier, se ha erigido una sociedad con instituciones frágiles. La actual crisis política tiene sus repercusiones, en la vida económica de la nación. El país se empobrece por una devaluación e inflación sin precedentes, en nuestra vida contemporánea. No pocos en el exterior se preguntan que es lo que comen, lo que beben, que aire, mueve a los dominicanos, para soportar con paciencia semejante empobrecimiento.
Ante la presente situación, no se puede evitar, recordar nuestro pasado; nuestra historia. Nos viene a la mente lo expresado por el Almirante durante su primer viaje de descubrimiento, al ver que los aborígenes no oponían resistencia «este es un pueblo extraño». Los antropólogos tienen en esta experiencia un excelente material de apoyo para soportar sus tesis sobre la supervivencia de la raza taína.
Don Angel Miolan, Secretario de Estado sin Cartera. Considerado como el padre del turismo en la República Dominicana, tenía razón cuando en noviembre del 2002, durante una breve visita que le hiciéramos, nos manifestara que la actividad turística no puede ser indiferente a los malestares inherentes a la sociedad, desvincularse de las cuestiones políticas, negar su aporte a la solución de los conflictos sociales en el largo plazo y de forma sostenida.
No obstante, de que los viajes y el turismo representen el 10.7% del producto interno bruto de la economía global, no se les ve, únicamente como una transacción económica o una serie de actividades que pueden ser apartados de la vida diaria o de su impacto en la población; estos tienen efectos sociales, dependen de las influencias externas, pero también de la estabilidad política y social interna.
El mundo ha cambiado después de los acontecimientos del 11 de septiembre del 2001, el temor a más ataques terroristas ha provocado que los norteamericanos disminuyan sus viajes hacia Europa, la principal meta de vacaciones para el viajero americano con mayor poder económico. A los inconvenientes en la industria de la hospitalidad en el Viejo Continente se añaden los problemas domésticos; un euro fuerte ha provocado que bajen las exportaciones, Alemania, un líder regional, vive una recesión que dura ya mucho, esto está provocando un impacto significativo en los viajes interregionales europeos; los germanos son los principales generadores de llegadas turísticas a nivel mundial.
La guerra en Irak se ha prolongado, por temor a más ataques terroristas, en los últimos 2 años y meses, los Estados Unidos han dejado de recibir 15 millones de visitas internacionales. La actividad turística es mayor generadora de plazas laborales en la nación norteamericana. El turismo es un sector de amplio rango, que genera empleos y divisas en los países de origen de los turistas. Se diligencia con urgencia la aprobación de los acuerdos de libre comercio.
La sostenibilidad del Medio ambiente y la globalización comercial junto a los acuerdos de libre comercio representan grandes retos para el Caribe y Sudamérica, las regiones de más rápida recuperación turística en Las Américas. Aunque no se pueden estandarizar las atracciones ni la cultura; bases del turismo, desde 1995 el comercio en la categoría otros servicios (los cuales incluyen los transportes y el turismo) crecen alrededor del 9% anualmente. Todos quieren tener un pedazo del pastel. Los gobiernos desde donde proceden las inversiones podrían estar apelando a las lealtades mantenidas durante la guerra en Irak para eliminar ciertos bloqueos en el archipiélago caribeño. En nuestro país, durante los últimos años, quienes más han invertido en el sector turístico, han sido los europeos, en el mediano plazo, pudiera haber un cambio en la proporción y composición de las inversiones.
Los acontecimientos históricos no se producen de manera aislada. Desde la otra globalización; aquella de la expansión de las ideas del enciclopedismo y las de la Revolución Francesa se produjeron transformaciones profundas en Las Américas. La emancipación de las antiguas colonias y la independencia de los Estados Unidos de Norteamérica, son algunas de las consecuencias del fenómeno. Con sus apéndices en el siglo XX, caracterizado por las pugnas internas, intervenciones militares y el posterior nacimiento de regímenes dictatoriales. Un país con tanto arraigo histórico, como el nuestro no ha sido indiferente a estos eventos. Siempre se ha visto a la República Dominicana como lo que pudiera significar en la región.
Tomará tiempo volver a la recuperación. Las crisis representan grandes desafíos, grandes oportunidades. La percepción que hay es la de que muchos de nuestros políticos, sordos y ciegos, no entienden el momento histórico que vive el país. El pueblo dominicano ha madurado, dentro del cuadrante, se encuentra una fase más adelante que sus dirigentes y espera que se comiencen a plantear soluciones definitivas a los problemas de larga data.