AEROPUERTO LAS AMERICAS. Unos quinientos dieseis miembros de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, fueron separados de las filas de sus instituciones en los últimos cinco años, por su vinculación en bandas de narcotraficantes.

Datos estadísticos confiables dan cuenta que en el período comprendido 2007-20l2, es cuando más militares y policías de distintos rangos, se vincularon en los casos de entrada y salida de cargamentos de drogas de República Dominicana.

Los informes indican que entre los cancelados y sometidos a la justicia, figuran 79 oficiales superiores y subalternos, 203 suboficiales, más de cien cabos y los demás rasos alistados de los diversos cuerpos armados.

La mayoría de los cancelados, pertenecían a la Policía Nacional y la Fuerza Aérea Dominicana, ocupando el Ejercito Nacional el tercer lugar y los demás a la Marina de Guerra, de acuerdo a los detalles.

Se reveló que al menos l03 de esos militares pertenecían al Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria (CESA), en su mayoría detenidos en los aeropuertos donde prestaban servicios y mezclados al narcotráfico.

También en muelles, puertos, puntos fronterizos y puestos de chequeo de vehículos y personas procedentes desde Haití, se produjeron muchas  detenciones de militares transportando diversos tipos de drogas.

A muchos de los militares y policías vinculados en bandas de narcotraficantes arrestados por los organismos correspondientes, les fueron confiscados propiedades, bienes, vehículos, entre otros objetos fruto de la venta de estupefacientes.

Se supo que muchos de los militares que pertenecían al CESA y que guardan prisión por tráfico de estupefacientes, ingresaron a las filas de los cuerpos castrenses ayudados por el tráfico de influencia, pese a tener antecedentes penales.

Trascendió que incluso a un simple sargento mayor de los vinculados en las redes de narcotraficantes, las autoridades decomisaron bienes y propiedades por más de l9 millones de pesos.

Ahora, según los reportes, los actuales jefes del CESA están siendo sumamente cautelosos y exigentes con las personas, especialmente del sexo masculino, interesados en ingresar a la institución.

Están envueltos, además los ejecutivos de la institución responsable de la seguridad de los aeropuertos, en un proceso de depuración de los actuales miembros diseminados en los diferentes aeropuertos del país.